Nos Parece Bien que el Gobierno Por fin Reconozca que Reformas Dañan el Crecimiento

 

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El presidente de Asech y la Multigremial Nacional de Emprendedores destacó la importancia de que Rodrigo Valdés, ministro de Hacienda, haya reconocido el impacto de las reformas estructurales en la confianza y la inversión en el país durante el Comité Político tradicional de los lunes. Así, Swett señaló que “nos parece bien que por fin el Gobierno esté dando señales de cordura respecto de la implementación de las reformas, reconociendo que éstas no son sagradas y que efectivamente generan daño al crecimiento económico y debilitan las confianzas”. Con esto, el titular de la Asech agregó que “este reconocimiento viene a confirmar lo que los emprendedores veníamos diciendo desde hace muchos meses, y lamentablemente muestra que el Gobierno ha actuado con terquedad en el cumplimiento del programa, sin querer escuchar a las Pymes que junto a nuestros trabajadores somos el verdadero motor de la economía del país”.

También indicó que “esto no puede quedar solamente en un llamado. Hay que hacerse cargo de las palabras y ver cuánto manejo político tendrá el ministro Valdés para poder recuperar la confianza, lo que dependerá directamente del tono de las reformas y el nivel de discusión. No se trata de salir de la reforma laboral para después caer en una reforma constitucional, después a las AFP, al sistema financiero, a las Isapres. Obviamente la incertidumbre llega por esta u otras reformas”, afirmó.

Finalmente, Swett enfatizó en que en el Gobierno “la orquesta sigue desafinando un poco”, apuntando a “las declaraciones del Comité Político de la Moneda y de la propia Presidenta de que aquí las reformas siguen firme hacia adelante. Es mal entender el rechazo que hay a las reformas en las encuestas, y que los grandes empresarios no se meterán la mano al bolsillo para reactivar la economía”

Efectivamente. Cuando los gobiernos del mundo presentan a los “ricos” lo hacen creando la imagen de los tipo Luksic, Paulmann o Angelinis. Pero quienes generan el empleo en su gran mayoría, no solo en Chile sino en el mundo son las pymes y sus dueños. Que no son ricos. La mayoría vive al día endeudándose para pagar la planilla del mes.

Y quienes resienten las reformas que para todos los efectos son aumentos de impuestos son estas pequeñas empresas. Las grandes corporaciones pueden y de hecho lo hacen, encontrar miles de formas de bajar impuestos o minimizar el impacto de las leyes laborales para aquellas en que el recurso humano es un factor relevante.

Eso es lo que no entienden los gobiernos del mundo. Los impuestos son deflacionarios. Generan menos crecimiento económico del que existiría sin ellos. Porque a medida que aumentan. los capitales van en búsqueda de sitios con menores impuestos o simplemente se refugian en activos que no paguen tanto, que en general es el efectivo o los conocidos como refugio, sean bonos u otros. Es por eso que en el mundo están pensando en colocar impuestos sobre el dinero como tal. Aunque no entiendan que los impuestos son deflacionarios y la culpa de la baja actividad económica, sea según ellos, de la gente que se empecina en no gastar el dinero ahorrado ni pedir créditos a pesar de las bajas tasas, entienden la dinámica actual y las consecuencias. Y están ejecutando la peor de las combinaciones, subir impuestos y recolectarlos de manera casi brutal y mantener las tasas bajas para no colapsar las deudas de gobierno.

Vamos por un camino realmente complejo. Y no se ve ninguna salida, porque los gobiernos y políticos jamás se reforman o creen que son ellos el problema en primer lugar.