Diésel se ubica bajo los $400 por litro y experto propone alza de impuesto

 

@emol

SANTIAGO.- El diésel marca precios bajo los $400 por litro en algunas zonas del país, su nivel semanal más bajo desde 2009, y la caída de este combustible podría seguir ahondándose. Sumado a ello, hoy se registrará una baja promedio adicional de $5,4 por litro, según el informe semanal de Enap, y la misma caída se verá en la bencina de 93, 95 y 97 octanos. En la Región Metropolitana el precio promedio del diésel está en $407 según los últimos datos de bencinaenlinea.cl, de la Comisión Nacional de Energía (CNE). En tanto, el precio mínimo registrado en esta zona del país es de $378, específicamente en una Copec de Quinta Normal, mientras el más caro es de $598 por litro, y se encuentra en la estación Terpel del kilómetro 21 de la Panamericana Sur, en San Bernardo. Ello significa una diferencia de $219. Hoy esas cifras deberían registrar una nueva reducción luego del informe de Enap. En las regiones los precios son más variados, pero tanto Arica y Parinacota como Valparaíso, Maule, Biobío y Araucanía ya alcanzaron precios mínimos bajo los $400 por litro. Ayer el precio del barril de petróleo cerró en US$ 32,28. Luis Edwin Gonzáles, investigador de macroeconomía y energía de Clapes UC, señala a "El Mercurio" que en el corto plazo se observarán ahorros en el presupuesto de los consumidores, así como algunas rebajas de este ítem en el Índice de Precios al Consumidor (IPC), lo que en general es una buena noticia. Añade que "si esto continuara en el mediano plazo —en el caso de que el precio del petróleo se mantenga en torno a los US$ 50 por barril—, provocaría otras decisiones más estructurales como el uso del automóvil o también la compra". Gonzáles explica que el piso de la caída del petróleo lo marcan los costos de extracción a nivel mundial. De todas maneras, se espera que el nuevo equilibrio considere una demanda mucho más baja por el efecto de la desaceleración de China. Según publicó "El Mercurio" la semana pasada, a pesar de la desaceleración económica registrada en el último año en el país, la demanda de combustibles en general aumentó impulsada por la baja de precios. De hecho, entre enero y noviembre de 2015, respecto a igual período de 2014, la venta de diésel en bencineras aumentó 10%. ¿Subir impuestos? Jorge Hermann, director de Hermann Consultores, advierte que este es el momento propicio para aumentar el impuesto al diésel y aminorar la distorsión con la gasolina, dada la estrechez de los recursos fiscales. Según señala, hoy el impuesto al diésel es de 1,5 UTM por m3, lo que equivale a $68, mientras el de la gasolina es de 6 UTM, es decir, $270. Hoy el precio promedio del diésel es $407 en la Región Metropolitana, y el de la gasolina 93 es de $683. La diferencia es de $276, valor que es histórico, asevera. Hermann agrega: "Por ejemplo, 1 UTM de impuesto al diésel recauda cerca de US$ 285 millones. Así, se podría aumentar el impuesto desde 1,5 UTM a 4,5 UTM y aumentaría la recaudación fiscal en US$ 855". El consultor asegura que la distorsión impositiva entre el diésel y la gasolina genera una asignación ineficiente de los recursos en la economía, como la preferencia por automóviles diésel. Luis Edwin Gonzáles reconoce el diferencial entre ambos combustibles, pero advierte que este impuesto es particularmente delicado porque los más expuestos al diésel son los transportistas, por lo que habría que hacer un análisis exhaustivo de las externalidades.

El problema de los impuestos y de los gobiernos en general, es que cuando los suben en un escenario en el que encuentran una justificación, los mantienen cuando ya no existe ésta.

Por supuesto a los gobiernos le interesa solo recolectar, por lo que las externalidades negativas, como el hecho de que el mayor costo por impuestos adicionales es siempre traspasado al consumidor generando menores ingresos disponibles y por ende menor actividad económica real no les importa mucho. Hasta que estrujan tanto la economía que tienen que recortar gastos fiscales, y eventualmente caer en default de sus obligaciones.

Lamentablemente estamos a cargo de retardados que lo único que quieren es ser re elegidos para continuar con el estilo de vida que jamás, en su gran mayoría, podrían tener de otra manera, porque no tienen ningún talento ni conocimiento real salvo el como recolectar fondos para financiar sus campañas políticas.

Pero la culpa es nuestra. Tenemos lo que merecemos.