@pulso
Sorpresivo para el mercado resultó el nivel de la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de marzo. El 0,5% que anotó la inflación escapó de los pronósticos de los expertos, quienes esperaban 0,3%.
La diferencia se explica principalmente por la división educación, que tuvo la mayor incidencia en el mes con 0,298 puntos y una variación mensual de 4,5%. En el desglose de este ítem, se muestra que el precio de la educación superior subió 4,4%. Ese nivel concentra más de la mitad del peso de la división educación en el IPC.
En tanto, el costo en jardín infantil el avance fue de 7% y de los preuniversitarios 8,3%. Otra de las variables que mostró una fuerte alza fue capacitación, la cual consignó un alza mensual de 8,8%, acumulando 14,4% en 12 meses.
Este último punto incidió 0,05 pp en la canasta, por lo que fue uno de los que llamó la atención a los economistas, al estar por sobre lo esperado.
El investigador de la Fundación Nodo XXI, José Miguel Sanhueza, explicó que “la desregulación es el denominador común de los sectores que tienen alzas significativas, pero en educación superior es bien llamativo, porque como nunca en la última década ha habido intentos de regular el mercado, pero que han generado dos sistemas: uno regulado y otro que es tierra de nadie”.
Y en el caso de los preuniversitarios, agrega Sanhueza, el alza “habla de la necesidad de encarar las deficiencias del sistema escolar, porque la gente opta por los preuniversitarios”.
Otro ámbito que tuvo un alza considerable fue la de los jardines infantiles, donde el IPC registró un incremento del 7%. María Soledad Rayo, presidenta del Colegio de Educadores de Párvulos, cree que ese aumento fue empujado por los jardines privados, pues los públicos y subvencionados reciben aportes estatales y son gratuitos.
“Los jardines infantiles privados deben haber subido el valor de la inscripción, de la mensualidad y de los materiales que piden, como los libros”, dice Rayo y explica que en el mundo privado un jardín infantil cuesta entre $80 mil y $350 mil, en zonas como Las Condes o Lo Barnechea.
La segunda división que más aportó en los precios fue Alimentos y bebidas no alcohólicas, la cual registró aumentos mensuales en ocho de sus 11 clases. Las más importantes fueron hortalizas, legumbres y tubérculos (3,1%), que incidió 0,079 pp., y carnes (0,8%), con 0,036 pp. De los 76 productos que componen la división, 45 consignaron alzas en sus precios, destacando tomate (12,7%), con una incidencia de 0,036 pp., y limón (12,2%), con 0,023 pp.
En suma, en los primeros tres meses, la inflación acumula un IPC de 0,6%, registrando así el menor avance para un primer trimestre desde 2009. En doce meses, los precios llegaron a 2%, el piso del rango meta del Banco Central de 2% y 4% y manteniéndose muy por debajo del punto medio del BC de 3%.
Los gastos en salud y educación superior deben ser los que más se escapan de los ciclos de aumentos de precios del resto de la economía, por mucho. Seguido en los últimos años de los arriendos, que ya se han normalizado bastante.
Que nadie diga nada (menos hagan) respecto de los costos de la educación superior es increíble. De los costos de salud tampoco. Todos hablan de los seguros que la cubren, que son las Isapres y Fonasa, pero la realidad es que los costos han subido estratosféricamente en las atenciones y exámenes, junto por supuesto con la hotelería.
Hoy una carrera relativamente poco competitiva y en una universidad privada sin mucho prestigio deja a los niños con una deuda de $25 millones a 20 años fácilmente. Es absolutamente impresentables, particularmente cuando no encuentras trabajo en lo que estudiaste porque los campos se saturan de inmediato.
Y eso es por la subvención estatal a los créditos aka CAE. Que debió haber sido un lobby gigantesco de la banca con los gobiernos de la concertación.
Una visita rutinaria al médico para exámenes preventivos completos sale algo así como $100.000 independiente del copago. Y estamos hablando de control sano sin ningún tipo de problemas. Cualquier condición o enfermedad sube el costo tres o cuatro veces de inmediato. Ni hablar del tratamiento de enfermedades crónicas.
Con la tecnología actual disponible, deberíamos estar bajando los costos de ambas áreas de manera estratosférica, no subiéndolos.
Tal vez para un hij@ en el futuro la enseñanza sería, no te enfermes por decisiones personales de estilo de vida, y no vayas a la universidad, al menos no a buscar una ventaja competitiva, que antes proveía y ahora ya no. De inmediato quitas del mapa dos de los grandes costos de vida.
Y que paso con la educacion publica, gratuita y de calidad??? hace rato ya que deberia ser gratis.
ResponderEliminarYo creo que la cosa es al reves. La educacion seguira siendo importante ya que las empresas chilenas se estan adaptando a mano de obra calificada en sus empresas y el tipo con cuarto medio simplemente no tiene trabajo. Y con la revolucion digital....madre mia.