El Gobierno que asuma en Argentina tras la votación de octubre debería bajar fuertemente los impuestos y el gasto público para reactivar una economía golpeada por la recesión y la inflación, propuso el miércoles un grupo local de economistas ultraliberales.
El plan, que choca con los proyectos de los principales postulantes a la presidencia, fue expuesto por Javier Milei y Diego Giacomini en unas jornadas universitarias ante un auditorio repleto. Los economistas de visión libertaria son minoría pero su voz en el mercado local, a veces rimbombante, está en aumento.
“Elevado gasto público es impuestos asfixiantes, inflación y tasa de interés elevadas y destrucción de riqueza”, decía la presentación.
El Gobierno del presidente Mauricio Macri rechaza este enfoque y destaca el ajuste más gradual que está aplicando para evitar consecuencias sociales aún más graves por la crisis económica.
Por su parte, los principales partidos de la oposición están en las antípodas ideológicas de la postura ultraliberal, a la que muchos asocian con Macri y culpan del actual hundimiento del mercado doméstico y del aumento de la pobreza.
La iniciativa planteó que la gestión que tome las riendas en 2020 debe elaborar un presupuesto con reducciones del gasto público y de la presión tributaria equivalentes a 15 puntos porcentuales del PIB y 10 puntos, respectivamente, en cuatro años.
“El próximo Gobierno iniciaría su gestión desahogando al sector privado, incentivando la inversión, la acumulación de capital, el empleo y el crecimiento”, decía la presentación de Milei y Giacomini.
Las autoridades y muchos analistas afirman que tales rebajas serían impracticables porque agudizarían el malestar social, en momentos de protestas crecientes contra el plan de austeridad que Macri acordó el año pasado con el FMI a cambio de financiamiento.
El programa del Gobierno prevé una meta de déficit fiscal primario cero para este año, pero los libertarios dijeron que Argentina debería apuntar a un superávit de unos 3 puntos del PIB para evitar problemas con el pago de la deuda.
En la exposición también participó Guillermo Nielsen, un exsecretario de Finanzas que renegoció la deuda argentina, quien propuso reducir los impuestos a las inversiones en la gigantesca formación de hidrocarburos de Vaca Muerta.
Hmmm…
Me parece que Argentina ya pasó el punto de no retorno en el cual te puedes apretar el cinturón para salir del problema. Igual que casi todo el mundo occidental, con la diferencia de que en el resto del mundo aún tienen que subir las tasas, en ese punto, van a estar en la misma posición que Argentina hoy. Que es finalmente lo que proponen los muchachos libertarios. Tratar de bajar los gastos y aumentar los ingresos promoviendo la inversión vía baja de impuestos. Sin duda es lo lógico. El único problema es que tienes una deuda de adamantium colgada sobre la cabeza. Si caes en default, everything is fucked…y vas a caer en default si bajas los impuestos. Porque los gastos de gobierno no los vas a poder reducir de manera significativa o realista, al menos no en varios años.
Lo único que se me ocurre podría salvar a Argentina de otro default que sumado a la crisis económica que se viene la va a derrumbar a un estatus de tercer mundo de hecho y tal vez de manera muy prolongada, es que intercambien deuda por participación en las empresas de gobierno con un porcentaje de rebaja compensado con el crecimiento futuro. Y ahí, que bajen los impuestos. Junto con deshacerse de la deuda, incorporarían a las empresas públicas gestión directiva privada que las haría más eficiente. En este punto prohibir la deuda pública, recolectar solo impuestos indirectos, aka, IVA, para los gastos de gobierno y el resto imprimirlo en proporción al crecimiento proyectado.
Soñar no cuesta nada. Pero van a terminar haciendo lo que hicieron en Grecia. Austeridad y arruinar a toda la sociedad y su gente para beneficiar a los acreedores bajo el concepto errado de que eso es lo mejor para el país por la confianza que genera.
Estos son los momentos en los que se necesita gente creativa y cojonuda para liderar al país.
Lo peor es que chile va para lo mismo. Chile tiene unos indicadores muy parecidos a argentina en deficit fiscal (3%) mientras argentina tiene (6%), tambien tiene casi los mismos niveles de corrupcion y un gasto fiscal en aumento.
ResponderEliminarAqui hace mucho debieron tomar medidas mas drasticas con el tamaño del estado.