Muchas personas prefieren guardar días de vacaciones y no utilizarlos todos de una sola vez, para así poder ir usándolos varias veces durante el año. Otros deciden organizar un viaje más largo y solo dejar de trabajar un período de los 12 meses. Pero, ¿cuál de estas dos opciones es la mejor? Para Viviana Tobar, psicóloga de Clínica Universidad de los Andes, no hay un número exacto de días necesarios para que una persona realmente puede desconectarse, pero sí existen formas de poder aprovechar esos feriados lo máximo posible, para que así ese período la persona realmente se pueda olvidar de las labores habituales. Tobar explica a Emol que en general al menos tomar 10 días de vacaciones de corrido puede ser más beneficioso, pero esto dependerá de la situación de cada persona y su contexto. "Si bien se ha visto que una cantidad de días permite realmente desconectarse de las labores habituales, también mucho va a depender de cómo la persona viva sus días de descanso", añade. Para esto, la psicóloga explica que el descanso no tiene el mismo significado para todas las personas y este dependerá de los gustos de cada uno. "No solo tiene que ver con el no asistir a la rutina laboral diaria, puede tener que ver también con realizar distintas actividades que en otro momento del año no podemos realizar con la frecuencia que quizás nos gustaría", puntualiza Tobar. Como ejemplo Tobar señala el poder dormir hasta un poco más tarde, salir a caminar, leer, conocer un nuevo lugar, interactuar con otras personas y poder disfrutar de las cosas simples de la cotidianidad que a veces, con el aceleramiento del año, se pierde. "Para otros el descanso puede tener que ver con una oportunidad de emprender un hábito saludable que lo ayude al bienestar a lo largo del año. Por ejemplo, retomar el deporte o realizar cierta manualidad o quizás buscar alguna clase", señala Tobar. La experta explica que el descanso es muy importante en la vida del profesional y que es parte del cuidado personal de estos. "Favorece al trabajador y al empleador, porque lo que se ve es que a mediano o largo plazo quien no toma vacaciones le empieza a afectar en otras áreas, como en las familiares, con los compañeros de trabajo y en la productividad", indica. Desconectarse Para varios no es fácil poder dejar atrás cien por ciento las cosas relacionadas al trabajo. Es por esto que Tobar recomienda evitar entrar frecuentemente a internet o revisar los correos, y delegar las tareas a los compañeros antes de salir. "Conectarse con el espacio propio, fomentar los lazos, conectarte con el lugar donde vas a estar, con la naturaleza. Si vas a salir a un lugar conocerlo y aprender de este, conectarte con la naturaleza y fomentar los lazos familiares", recomienda la especialista como reemplazo. Cómo preparar la vuelta al trabajo Es común que varias personas el domingo o el día antes de tener que volver a retomar la rutina laboral, se sientan con ansiedad. La psicóloga recomienda para poder rendir la primera semana, no volver de una viaje el día antes de entrar al trabajo, para así poder hacer una pequeña transición y descansar de las vacaciones. "Si saliste de tu ciudad habitual, ojalá volver uno o dos días antes para reorganizarte en tu casa. Preparar la llegada al trabajo ya que quizás tienes que abastecer las cosas básicas en tu despensa o ver si hay cosas que quedaron por ordenar, revisar la ropa, desarmar maletas, lavar y, al mismo tiempo, conectarse con las cosas básicas que se necesitan para volver a trabajar", finaliza Tobar.
Este consejo apesta…
Las vacaciones son para la mente, no el cuerpo. Y las únicas vacaciones posibles son cuando las usas para algo completamente diferente a tu trabajo, y a tope.
Si vas a una playa a estar echado en una litera tomando mojitos todo el día, vas a llegar absolutamente agotado. Es típica la frase necesito vacaciones para mis vacaciones. Y es justo por eso. Gastar el tiempo sin hacer nada es MUY cansador mentalmente, porque inconscientemente estás igualmente pensando en el trabajo.
Unas vacaciones verdaderas son aquellas en las que estás mentalmente absolutamente ocupado en algo diametralmente opuesto a tu trabajo normal o rutinario.
Por eso las vacaciones las debes planificar específicamente.
Las supuestas “vacaciones” que todos tomamos no son eso, son simplemente un descanso físico o receso en la vía de la misma rutina de trabajo.
Vacaciones es otra cosa.
Es enviar tu mente hacia otros lugares. Y pueden ser tan cortas como una semana muy intensa de una actividad que te renueva completamente.
SO…
No importan los días en realidad, aunque muy pocos no alcanzan para desarrollar una actividad que te absorba salvo que las vengas practicando parcialmente y te dediques por completo a ella ahora, que no es lo común.
Un viaje a un lugar y cultura que no conoces por ejemplo, te desconecta completamente y te entrega otras perspectivas que tu mente se preocupa de procesar y ocupa por completo tus pensamientos. Llegas cansado físicamente, pero mentalmente reseteado. Practicar el deporte que querías, el hobby que te apasiona, etcétera etcétera. Esas son vacaciones.
He sentido que los viajes al extranjero realmente son vacaciones pq conoces otra gente, cultura, realidades que te despejan la mente de lo que sucede en chile. Igual es cansador hacer tour de 9 a 18 hrs en otro pais pero si te programas se le puede sacar mucho provecho.
ResponderEliminarPD: Y desconectarse de celular y email es la clave.