Las diferencias entre finanzas y economía

@economiaynegocios

Muchos tienden a pensar que ambas disciplinas son lo mismo cuando, en realidad, hay más diferencias que semejanzas.

Arturo Cifuentes

La semana pasada, en una reunión vía zoom, comprobé algo que siempre había sospechado: mucha gente no tiene clara la diferencia entre economía y finanzas. En lo que sigue intentaré aclarar esta diferencia.

La economía es una ciencia social; las finanzas son una disciplina cuantitativa. De hecho, Smith (La Riqueza de las Naciones) no usa ninguna ecuación, y Keynes (Teoría General del Empleo, el Interés y el Dinero) usa muy pocas. Un libro de finanzas sin ecuaciones, sin embargo, es como un asado sin vino, un concepto imposible. Esto, por supuesto, no significa que la economía sea una disciplina inferior o superior a las finanzas, es simplemente distinta.

Paul Samuelson, en su libro Economía que escribió junto a William Nordhaus, y que es el más popular en la enseñanza en la materia, da en mi opinión la mejor definición de economía que conozco, breve y simple: lo esencial de la economía es entender cómo una sociedad emplea sus recursos escasos (esto es, finitos). La Enciclopedia Británica (más confiable que Wikipedia) expresa: el estudio de la creación y distribución de riqueza, la conducta de los precios, y las fuerzas que determinan el ingreso nacional y el empleo.

Las finanzas, en cambio, se refieren a algo más concreto: ac ómo manejar el dinero y las inversiones. Dicho de otra forma, cubren todos los vehículos y mecanismos que conectan a los inversionistas y ahorrantes con aquellos que necesitan capital y crédito. Las tres grandes áreas son las finanzas personales, corporativas, y públicas (gobierno).

Es obvio que estas disciplinas se tocan en ciertos ámbitos, pero son más las diferencias que las similitudes. De hecho, en términos académicos, al contrario de la economía que siempre reside en facultades especializadas, las finanzas también han encontrado albergue en departamentos de matemáticas o escuelas de ingeniería.

Los libros de economía hablan de inflación, trabajo y desempleo, oferta y demanda, monopolios, y política monetaria. Los libros de finanzas hablan de acciones y bonos, riesgo y retorno, portafolios eficientes, productos derivados, y manejo de riesgo.

Por último, una diferencia pragmática: las finanzas, desde un punto de vista personal, son una disciplina más peligrosa. En el terreno de las finanzas los errores (normalmente pérdidas grandes de dinero) cuestan caros y son casi siempre fatales en términos profesionales. No hay segundas oportunidades. Por el contrario, un economista que comete grandes errores casi siempre puede empezar de nuevo. Nunca falta el organismo internacional o consultora dispuesto a recibirlo. Creo innecesario dar ejemplos.

Concuerdo casi completamente.

Los economistas no le apuntan ni al quinto bote nunca y sin embargo enseñan puras leseras inaplicables casi como si fuese religión, incontrastables e incomprobables en la realidad en las que se supone son las mejores escuelas de economía del mundo. Lo único que sabemos es que todas las teorías que enseñan, no sirven.

En finanzas aplica lo que explica PhD international cuando los gestores gestionan para altos patrimonios, bancas de inversión o para un family office.

Cuando se trata de recomendar fondos mutuos e inversiones a retail, igualmente no le apuntan ni al quinto bote.

Por eso no puedes creer a pie juntilla lo que te dicen en la tele o RRSS, por muy terno Gucci de 4000 USD que tenga el que habla, salvo que tenga experiencia real en FINANZAS institucionales de inversiones.

Y con todo, es casi siempre una opinión personal basado en su experiencia, no en criterios objetivos replicables en sus resultados.

No por nada jamás evitan las crisis ni menos cumplen con sus promesas progre hippies unicornianas de eliminar los ciclos de negocios para tener un crecimiento sostenido, inclusivo y diverso que llegue a todos…De las que se cuelgan los políticos para ser electos obviamente y prometer las mismas pendejadas.

De hecho, me da la impresión que los economistas se han transformado de a poco en las cheerleaders de los políticos justificándoles todas sus idioteces. Para todos lados. No hay nada de científico hoy en los economistas, simplemente ajustar las hipótesis al resultado preconcebido que se quiere obtener para impulsar alguna campaña.

Y los financieros sanhattinos del mundo en vendedores de fondos mutuos. Y en algunos casos absolutamente desvergonzados vendiendo productos carísimos y muy, muy malos. Por eso están perdiendo terreno a dos manos con los ETF´s y teniendo que bajar sus comisiones a cero en todo el mundo. Como el Itaú que las bajó a cero en los fondos de rentas fijas a corto plazo. Hay que ser suicida para tomar fondos mutuos en formato APV en renta fija, pero al menos no te cobran hoy por el intento de suicidio.