Empresas sanitarias mantendrán suspensión de cortes del servicio a clientes morosos hasta abril de 2021

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La Asociación Nacional de Empresas de Servicios Sanitarios (Andess) confirmó la continuidad del plan especial de apoyo a clientes hasta el 30 de abril de 2021, por lo que no habrá cortes por morosidad en el pago de cuentas hasta esa fecha. "Una de las principales preocupaciones de las empresas sanitarias ha sido que todos los hogares de nuestro país, independiente de su situación económica, puedan tener agua para enfrentar esta pandemia", dijo Jessica López, presidenta ejecutiva de Andess. NOTICIA RELACIONADA Senado rechaza veto del Gobierno a suspensión de corte de servicios básicos y deja fuera plan solidario de telefonía e internet 202 "Desde el inicio del Estado de Catástrofe, la industria sanitaria suspendió los cortes de agua potable por no pago a todos sus clientes, lo que ha beneficiado a más de 900 mil familias en este período", dijo la líder gremial. López aseguró que "mantendremos a todos los hogares con agua, sin corte por no pago" y explicó que "aquellos clientes que mantengan deudas con su servicio de agua potable y no dispongan de los recursos para saldar su cuenta, seguirán con suministro ininterrumpido por los próximos seis meses". Continuando con lo establecido por la Ley 21.249, las sanitarias también extenderán la posibilidad de gestionar convenios, para concretar el prorrateo de las cuentas morosas de las familias más vulnerables, personas mayores, desempleados y microempresas. Con todo, el gremio reiteró el llamado a quienes están en condiciones de pagar su cuenta de agua potable, a que se mantengan al día. "Esto es esencial para que la industria siga operando con normalidad, manteniendo la cadena de pagos con trabajadores, empresas proveedoras y contratistas, y continuar con las inversiones necesarias para mantener los servicios frente a la sequía y el cambio climático", afirmó.

Lo comentado en el LIVE. Mientras no se liberen las cadenas de pagos, no se sentirán realmente los efectos de los encierros. Que entre otras cosas, implica que no se sentirán los efectos de las bajas en los valores de los activos.

Estamos en un periodo muy peligroso.

Porque estamos retomando algo cercano a la normalidad. Que va a detonar que el gobierno comience a quitar los soportes económicos. Es decir, retomar la cadena de pagos.

Ojalá vean a tiempo que esto no tiene tanto que ver con reactivar la demanda como sostener los precios de los activos nacionales, incluidas las viviendas.

Que es justo lo opuesto a lo que están haciendo con el retiro del 10% en la forma que lo están planteando de liquidación directa y no de creación de dinero, aunque el central puede intervenir para dar soporte a la deuda chilena. Peor aún con el impuesto al patrimonio a los ricos, que en gran cantidad es inmobiliario.

Hay inyectado en forma de crédito y cash algo así como USD 40 billones a la economía y no movieron nada.

Especialmente cierto ahora que se recuperó mucho de la confianza en el país y futuro con el proceso del plebiscito que nos da dos años de tranquilidad y de terminar al fin con las excusas huevonas de que toda la culpa la tiene Pinochet, para todo. Que apestoso ha sido eso por casi 20 años. Espero que al fin se termine el aprovechamiento de, a esta altura, historia antigua.

Por eso ha subido el CLP esta semana, a pesar de todos los pronósticos. Confianza, no cobre. Al menos momentánea.

Podrían monetizar sin problemas bonos privados de las AFP´s y no le harían cosquillas a nada.

Pero me late que están atrapados con las teorías económicas en curso de cantidad de dinero que dicen que eso es inflacionario, a pesar de todas las demostraciones de lo contrario en Europa y Japón cuando colocan en la balanza la confianza en la economía y gobierno en un periodo recesivo depresivo como el actual.

Solo resta ver si nuestros supremos líderes, especialistas de salud y periodistas imparciales y rigurosos en sus investigaciones nos mandan de nuevo a la B como lo están haciendo en Europa, o nos dejan tranquilos retomar las actividades y preocuparnos de los grupos de riesgo mientras el resto intenta arreglar los cagadazos que dejaron los primeros con sus huevadas histéricas.