En 2020, en el plebiscito de entrada, las únicas comunas de Santiago en que no ganó el Apruebo fueron Las Condes, Vitacura y Lo Barnechea. La explicación de María José Gómez, coordinadora de la campaña del Rechazo, fue que esas tres “son comunas altamente informadas”.
En la campaña de 2022, desde el Rechazo se hizo ver que el texto constitucional era “incomprensible para la mayoría” (Lucía Santa Cruz), y que por “lo paupérrimo de nuestra formación cívica y conocimiento histórico, y los bajos niveles de comprensión lectora”, los chilenos no podrían entenderlo (Cristián Warnken).
Tras el triunfo del Rechazo en el plebiscito de salida, hemos comprobado que ese clasismo no era patrimonio de un sector: cruza Chile transversalmente, de derecha a izquierda.
Es un roteo paternalista, modulado en distintos tonos.
Uno es derechamente cruel: “¿Cómo amanecieron mis señoras rechazonas dueñas de casa que no se les pagará ni uno hoy por las labores domésticas realizadas? ¿Cómo van esas lagunas previsionales”, se burló el exconvencional Nicolás Núñez, el mismo que se hizo famoso al votar desde la ducha. “Hay poblas que se sienten condominios. Más del 60% dijo estar bien como están. Excelente por ustedes. Pero sigo viendo desclasados, racistas, homofóbicos y mucho individualismo”, agregó la exconvencional Natividad Llanquileo.
Otro tono es compasivo: no es su culpa, a ustedes los engañaron. “Los pueblos originarios no entendieron el texto”, dijo el director nacional de la Conadi, Luis Penchuleo. El exconvencional Marcos Barraza atribuyó la votación por el Rechazo a una campaña que “puso en el centro las mentiras”.
Otro tono es autocrítico. “No supimos explicar bien. No se entendió bien y eso fue un error nuestro”, se lamentó el exconvencional Luis Jiménez.
Pero el paternalismo es el mismo en todos los casos: hay una verdad que, por ignorancia, mentiras o incapacidad de enseñar, no fue entendida por el pueblo. La relación es vertical, patronal. Yo sé, tú no. Yo hablo, tú escuchas. Yo te explico, y tú (ojalá) entiendes. Y si no entiendes lo que yo te explico, peor para ti.
Chile, una larga y angosta faja de roteo.
Es un despotismo ilustrado de izquierda: “todo por el pueblo, pero sin el pueblo”. No entra en la lógica de los roteadores que muchos habitantes de comunas vulnerables tienen una experiencia vital y una manera de pensar distinta -ni superior ni inferior- que les hizo valorar de manera diferente el proyecto.
Un caso es el de Petorca. “Está súper claro quién ganó con el rechazo, y los de Petorca felices de seguir sin agua”, escribió el diputado Jaime Naranjo. Para muchos, sólo la ignorancia puede explicar que sus habitantes hayan votado contra una Constitución que consagra el derecho al agua. ¿No piensan que los petorquinos también son personas complejas, con otras preocupaciones y prioridades? ¿Que, tal vez porque conocen de primera mano el problema, son más incrédulos de que una declaración en la Constitución lo resuelva?
¿Por qué la gente votó contra tener más derechos? Tal vez porque desconfía del poder. ¿Por qué habría de confiar en una lista teórica e interminable de 108 derechos, prometida desde ese poder?
“Cuando una institución pierde la confianza de la ciudadanía, las personas quedan sujetas a creer información negativa sobre ella”, advierte la académica Loreto Cox. Hubo una campaña de fake news, claro: no es cierto que se iba a estatizar la vivienda ni las pensiones. Pero sí es cierto que el énfasis de la Convención estuvo lejos de la propiedad, y que el asunto fue minimizado, e incluso ridiculizado (“no es tu platita”, dijo el exconvencional Daniel Stingo). El Rechazo leyó mejor ese clima cultural.
Muchos enfatizan los argumentos “irracionales” que dan algunos votantes del Rechazo en comunas populares. Es la salida fácil: la gente votó equivocada, por engaño o ignorancia. Pero la evidencia muestra que el votante “ilustrado” no es más racional. Todos votamos desde nuestras emociones y nuestro sentido de pertenencia.
David Hume decía que la razón es “sólo la esclava de las pasiones, y no puede pretender otro oficio que el de servirlas y obedecerlas”. Experimentos contemporáneos le dan la razón. En política, tendemos a formarnos una opinión automática, basada en la intuición, y luego usamos la razón para justificarla. No razonamos como científicos, sino como abogados defensores de nuestros prejuicios.
La mayoría de los que estaban fuertemente identificados con el proceso del estallido y la Convención habrían votado Apruebo fuera cual fuera el texto. Con una mano en el corazón, ¿cuántos de quienes leyeron el proyecto de Constitución cambiaron su voto después de leerlo? Sin duda, muy pocos. A la gran mayoría, la lectura les sirvió para encontrar argumentos que reforzaran una decisión -Apruebo o Rechazo- ya tomada de antemano, por razones identitarias y emocionales, antes que por el estudio desapasionado y neutral del texto.
Es el sesgo de confirmación. “Una vez que las personas se unen a un equipo político, quedan atrapadas en una matriz moral”, afirma el sicólogo social Jonathan Haidt. “Ven confirmaciones de su narrativa en todas partes”.
Tener más información no necesariamente cambia nuestras decisiones, sólo nos da mejores argumentos para fundarlas. Y eso vale por igual para el votante de Las Condes, Petorca, Ñuñoa, La Pintana o Tirúa.
Esto no significa que no debamos preocuparnos del alarmante fenómeno de las fake news. Los medios de comunicación estamos al debe en nuestra responsabilidad de desmontar mentiras, e informar de los asuntos públicos de manera clara y comprensible. Una sociedad es mejor cuando está mejor informada.
Pero atribuir una paliza electoral a la ignorancia del pueblo es clasista, antidemocrático, intelectualmente deshonesto y políticamente suicida.
Más que rotear, lo que falta es escuchar.
HUH??
Si tuviera más puteadas perfectamente podría ser un post del blog…
No mucho que agregar. Las élites son soberbias. Pero por lejos las peores son las académicas, que es la élite actual de izquierda.
Por alguna razón se creen más inteligentes que todo el resto solo por la cualidad de recitar 20.000 citas de autores que nadie conoce por segundo. Eso lo puede hacer un chimpancé. Pero por algún motivo creen que eso los califica de genios. Especialmente cierto en las “ciencias” humanistas, que es desde donde sale todo este movimiento progre ñuñoíno finalmente.
Peor aún, la gente de izquierda trata de IMPONER sus ideas. La gente de derecha solo rotea, pero no le interesa imponer nada a otros. Esa es la ENORME diferencia entre las élites.
Marx quería eliminar los ciclos económicos mediante sus teorías. Gramsci igual. Y todos los marxistas en general.
Eso se llama soberbia, y arrogancia. Creen que pueden amoldar la naturaleza humana a sus teorías huevonas. Y peor aún, que pueden hacerlo aún cuando han demostrado no funcionar, ni una sola vez.
En ramas más científicas de verdad habrían descartado desde hace bastante tiempo teorías que no explican la realidad. Pero en las ciencias humanistas, y la economía es una de ellas, parece que no aplican método científico, nunca. Solo tuercen la data para justificar sus conclusiones preconcebidas.
En fin.
Buen artículo. Lleva como tres seguidos…
No le queda otra, le pegan PLR en su pega si se pone a escribir weas progres despues del plebiscito.
ResponderEliminarComo decia el Gonzalo Caceres esta OUT OUT OUT. So last year.
no me sorprenderia que ahora todos los matinales sacaran algun tipo de seccion mostrando lo bakan que era chile en los 2000 en el peak de la concertacion clasica.
nn
Se viene todo eso en la tele, ayer vi a rodrigo sepulveda que le habia mandado un mensaje a Boric. Se estan todo desacoplando.
EliminarSegun lei en alguna parte, CNN internacional esta siendo tomada por los Patriotas, ojala sea cierto y eliminen a los progres de todo el planeta
EliminarSimplemente Daniel Matewea, un genio que se supera a si mismo y asombra por su alto CI.
ResponderEliminarLa cara de Matamala en el conteo de votos de la victoria del rechazo, una tristeza que no se la saca nadie, ahora rabia y odio con resentimiento zurdo y contaminando, con sus escritos zurdos de él y de lo que representa la élite progre,pero no en representación de todos los chilenos, su arma la pluma del neomarxismo progre
ResponderEliminarHAY Q RETIRARSE D LOS PARTIDOS POLITICOS! LOS CHILENOS SEREMOS EL HAZMERREIR DEL MUNDO SI ACEPTAMOS LO Q QUIEREN HACER ESTOS HDP: El periódico estadounidense The Wall Street Journal analizó, a través d una columna d opinión d Mary Anastaia O'Grady, el reciente plebiscito constitucional, donde la opción Rechazo se impuso con el 62% frente al Apruebo, q obtuvo un 38%...No es lo q se acordó en el Art. 142 d la enmienda d 2019 para permitir el proceso d
ResponderEliminarreescritura. En referencia al texto final d la asamblea constituyente, dice: “Si se rechaza la pregunta planteada a los ciudadanos en el plebiscito ratificatorio, (la actual Constitución) seguirá vigente”. En otras palabras, el problema está muerto..."El autor intelectual d esa toma de poder boliviana bajo el disfraz d la democracia es el ex vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera. La prensa chilena informa que el Presidente chileno, Gabriel Boric, es seguidor del marxista y exguerrillero boliviano", afirmó la columnista...
https://www.wsj.com/articles/chile-takes-a-second-run-at-national-suicide-constitution-vote-democracy-socialists-communists-democrats-welfare-state-solution-11662913861
https://www.df.cl/df-constitucional/columnista-del-wall-street-journal-y-nuevo-proceso-constitucional-chile
En el comentario sobre la izquierda que intenta imponer sus ideas frente a la derecha que rotea sin querer imponer nada, no estoy totalmente de acuerdo en la formulación. Lo que pasa es que la derecha se maneja en la cultura dominante, capitalista y burguesa, de modo que no tienen que imponer sino conservar. La izquierda marxista es terraplanista, tienen que imponer su visión porque no resiste el análisis empírico y menos científico. El roteo depende de cuán corto es el elástico de cada uno.
ResponderEliminarDicho eso, Matamala acusa el golpe y rectifica, pero le sigue faltando profundidad. Da muchas vueltas para no decir que la gente rechazó mayoritariamente la propuesta de NC por mala y punto. Y el 62 % indicó que la propuesta no tenía remedio y prefirió quedarse con la vilipendiada difunta mientras nace una nueva y buena constitución. En cuanto al gran roteo, es transversalmente chileno por que es el gran espejo que se pone delante de cada uno. Sólo los rotos rotean y uno será siempre el roto de otro.
Los unicos que han sido consecuentes son los Republicanis, que desde siempre han dicho que si ganaba el rechaza seguia la constitucion actual, pero el resto de derecha son unos maricones muertos de miedo vendidos y falta de bolas, no volvere a votar por ni un fleto de derecha hasta que se vayan los los Chaguanes y cia, valen ongo, solo buscan su interes y beneficio, no se olviden que los votantes se estan empoderando contra la casta politica, viva la libertad Carajo
ResponderEliminarLa Risa Remedio Infallible. Grateful! God please help you and us! Free us from the onu! Thanks my creator! I wish us all the best and especially cooperation to avoid "the oppression". Being an expat it is not nice!
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