Tras críticas del Demre a ranking de colegios, expertos debaten falta de transparencia en el sistema educacional

@ElMercurio

Ayer, el Demre emitió un comunicado refiriéndose a las comparaciones y ranking de colegios que han realizado universidades tras la publicación de los resultados de la PAES (Prueba de Acceso a la Educación Superior). Esto, luego de que el Ministerio de Educación modificó la forma de entregar la información de la prueba, lo que complicó los análisis que hacían los centros de estudio.

El Demre planteó que las comparaciones “son engañosas e improcedentes”, puesto que las pruebas “no sirven para medir la calidad de la educación entregada por un determinado establecimiento”, y que “no procede que se comparen colegios de diferente dependencia, puesto que, como se sabe, esta se vincula estrechamente con el nivel socioeconómico de la población atendida”.

También indicaron que “estigmatiza y daña a la educación pública”. En el ranking de los 100 mejores colegios en la PAES, 96 son colegios privados, tres municipales y uno subvencionado.

Cuestionamientos

La postura del organismo es apoyada por el ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, quien ayer planteó que “comparto la crítica del Demre, no es correcto hacer esos ranking”, ya que “hablar del mérito es siempre muy tramposo”, considerando las distintas realidades de los estudiantes.

Agregó que “felicitamos y celebramos sus resultados (de colegios particulares pagados), pero no son comparables los modelos educativos donde hay que recibir a todos los estudiantes, sin distinción ni ningún tipo de discriminación”.

¿Cómo saber en qué estado está el sistema educativo si no hay referencias o puntos de comparación? Eso se preguntan distintos actores del mundo educativo debido a la postura de la autoridad. Se suma, además, que ya no está disponible, por lo menos de manera rápida y fácil, en la página web de la Agencia de Calidad de la Educación el tradicional buscador de colegios con el cual apoderados se orientaban sobre la calidad de los colegios.

Daniel Rodríguez, director ejecutivo de Acción Educar, señala que “contar con datos robustos, válidos y confiables sobre los resultados de los establecimientos educacionales, y que estos se difundan ampliamente, es esencial”.

Añade que “evaluar los colegios o el sistema en su conjunto en base a promedios en tests de admisión es erróneo, pero la solución no es esconder los datos, sino informar a la ciudadanía sobre la calidad de la educación que entrega cada colegio. Lamentablemente, en esto último hemos retrocedido, incluso intentando eliminar el Simce, por ejemplo”.

Similar opinión tiene Sebastián Izquierdo, coordinador académico del CEP, quien reconoce que “es una vieja discusión, en la cual existe una tensión por parte de la información pública que evidencian los listados”, y que, aunque las comparaciones tienden a favorecer a establecimientos particulares y privados, “cuando no existe ese tipo de información pública, se estaría restringiendo la información que deben tener los padres y apoderados. La ciudadanía necesita más información y mejor”.

Ernesto Treviño, investigador principal del Centro de Justicia Educativa de la UC, enfatiza en que la PAES no busca conocer la calidad de los aprendizajes de los colegios, ya que se trata de una medición voluntaria, “por lo tanto, tiene un sesgo de representación de los estudiantes”.

Y defiende: “Para medir la calidad de la educación se deberían considerar los aprendizajes de inicio, el nivel socioeconómico, el avance en los aprendizajes y la consistencia en las trayectorias educativas de los estudiantes”.

Respecto de los buscadores de colegio, dice que “representan una información valiosa para los padres”, y que podría ser que, “dada la pandemia, tuvieran información desactualizada de logro de aprendizajes, pues no se rindió el Simce. De todas maneras, siempre es mejor tener más transparencia para las familias y este cambio debería haberse explicado mejor”.

Por su parte, el presidente de la Asociación de Educadores de Chile, José Luis Velasco, considera que “los rankings son como el termómetro. Y hacerlos o no, no influye en nada en la calidad de la educación. Ayudan a familias a poder identificar lo que ellos miden. Ni más ni menos”.

DAÑO

El Demre denuncia que “este tipo de comparaciones estigmatiza y daña a la educación pública.

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  Etapas. El 17 de enero, los estudiantes que postularon a alguna carrera, de los más de 245 mil que rindieron la PAES, conocerán el resultado de su acceso a la educación superior e iniciarán el proceso de matrícula. Ato

Convenio por $2.500 millones buscará reparar infraestructura escolar de establecimientos de Santiago

El ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, y la alcaldesa de Santiago, Irací Hassler, firmaron ayer un convenio para la recuperación de establecimientos educacionales de esa comuna, donde destacan intervenciones a los liceos emblemáticos, mediante la transferencia de recursos con el plan de reparación y recuperación de establecimientos educacionales en situación de urgencia 2022.

En concreto, son $2.548 millones que se destinarán para reparar 17 establecimientos de la comuna.

De manera general, en el Ministerio de Educación destacaron que el plan de reparación permitirá repartir más de $56 mil millones que asignará la cartera, a los que 489 establecimientos del país pueden aspirar.

El anuncio se realizó desde el Internado Nacional Barros Arana (INBA), que será refaccionado gracias al acuerdo. Las autoridades recorrieron el establecimiento para verificar los daños que presenta, tanto por remodelaciones históricas pendientes que son demandadas por la comunidad como por los incidentes y hechos de violencia estudiantil, que han dejado desmanes en medio de protestas.

En el caso del INBA, recibirá más de $692 millones para reparaciones y mantenciones en los baños, en donde se cambiarán los artefactos y la grifería en mal estado; se le hará una mantención al alcantarillado; se repondrán cielos, luminarias y el suelo de los dormitorios; se retirarán cubiertas de asbesto, y se repararán filtraciones de agua.

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La primera pregunta obvia que se me viene a la cabeza es preguntar a que diablos le llaman educación.

No es obligación de escuelas y profesores controlar a los pendejos vándalos que hacen éstas tonterías, si tal vez identificarlos y moverlos hacia lugares donde estén los profesionales adecuados para tratar estas conductas antisociales.

Tampoco es entregar valores. Menos en los colegios públicos. Por defecto se entiende que existe el respeto a los horarios y el tiempo de todos, junto con las obligaciones relacionadas al aprendizaje en la forma de pruebas. La tarea de los profesores es enseñar contenidos curriculares bajo un ambiente pre determinado de disciplina y normas de conducta a cumplir por profesores, padres y apoderados. Obviamente tienen que tener las competencias adecuadas para identificar problemas en los niños así como las mejores formas de enseñarles y que de hecho aprendan.

Los padres han delegado completamente la función de crianza en los colegios y profesores. Y estos se han tomado esas atribuciones, especialmente en colegios públicos, pero también en privado, traspasando sus valores, y resentimientos en muchos casos, a los niños.

Los profesores siempre han sido de izquierda. Pero antes eran neutros en términos valóricos y éticos. Como debería ser.

Se asume, me da la impresión hoy en día, que los problemas de mala crianza en las casas tienen que ser absorbidos y resueltos por los colegios y profesores, y eso les da absoluto poder sobre los niños para colocarles sus propios puntos de vista sobre cosas en las que no deberían tener absolutamente ninguna incidencia porque eso pasa a ser adoctrinamiento.

Lo primero que haría sería EXIGIR a la educación pública, como apoderado, que la educación fuese neutra y orientada a entrega de contenidos curriculares y habilidades técnicas. Prohibidas las ciencias humanistas actuales, salvo como un resumen histórico del tipo filosofía.

En escuelas privadas o subvencionadas puedes elegir la línea educativa que desees.

Pero no puedes mejorar lo que no tienes o está arruinado desde la casa, solo lo puedes empeorar casi con toda seguridad.

O acaso los profesores públicos son unos dechados de virtudes y ética profesional impecables en los que puedes confiar para educar de hecho a tus hijos en valores?…

Típicamente no dejarías a nadie que se quedara con tus hijos solos si no confías plenamente en que le enseñarán tonterías o que se contagiarán de la mala educación o malas costumbres. Porqué confiarías en que completos desconocidos le enseñaran valores que tu no le enseñas con el ejemplo a tus hijos?…

Ridículo.

Pero eso es lo que ha pasado en los últimos años. Dejamos que gente completamente ideologizada entregara valores a nuestros niños en vez de entregárselos nosotros mismos.

Ahora vemos las consecuencias de ello.