El video es breve, pero contundente. En él, el expresidente Ricardo Lagos respalda a Jaime Ravinet, candidato al Consejo Constitucional. Lo describe como un “hombre de acción que es capaz de ejecutar y que conoce muy bien el aparato del Estado”.
El video generó revuelo. Lagos fundó el PPD, cuya presidenta, Natalia Piergentili, compite contra Ravinet en las elecciones del Consejo por la Región Metropolitana.
Lagos explica su apoyo a su exministro por ser un “hombre de acción”. Una razón atendible si estuviéramos eligiendo alcaldes o concejales, pero poco atingente en el debate sobre la nueva Constitución.
Tampoco es esta una elección en que se vota solo por una persona. Hay cinco listas en liza, y los sufragios por los candidatos de una lista se suman para determinar cuántos cupos obtiene cada una. Un voto por Ravinet -la campaña más millonaria, con $126.444.864 recaudados- es un voto por la lista de Chile Vamos, y por plasmar sus principios ideológicos en la nueva Constitución.
Alambicado camino el de Lagos. De combatir la Constitución de Pinochet, a darla por superada (“hoy despunta la primavera”, proclamó al ponerle su firma a las reformas de 2005), no pronunciarse en el plebiscito de 2022, y ahora allegar votos a la lista de la UDI, RN y Evópoli para la redacción del nuevo texto.
Al cierre de esta columna, la presidenta del PPD aseguró que Lagos “habló conmigo para aclarar lo ocurrido con el video de otro candidato (…) Su corazón y su voto están en la centroizquierda”. Más allá de si retira su respaldo a Ravinet o no, lo ocurrido es inédito en los últimos 30 años: un expresidente apoyando a un candidato del sector político opuesto.
Y las razones que esgrime son la mejor muestra de la confusión en que la clase política está sumiendo a los ciudadanos, a dos semanas de la elección. Una campaña en que campean la desinformación y el embuste.
Revisemos la franja televisiva.
Es un juego de máscaras, así que hay que partir explicando quién es quién. Chile Vamos se presenta como “Chile Seguro”. La ex Concertación es “Todo por Chile”. El oficialismo de Apruebo Dignidad más el PS se llama “Unidad para Chile”. El Partido Republicano y el Partido de la Gente, que no van en pactos, sí conservan sus nombres.
Chile Vamos (perdón, “Chile Seguro”) habla casi exclusivamente de la delincuencia. Uno de sus candidatos nos cuenta que “Constanza fue asaltada en su negocio. Algo tenemos que hacer, yo estoy con Constanza”. Qué hará ese consejero constitucional por Constanza es un misterio que no revela.
Nos hablan de un agricultor que “ha sufrido más de 300 atentados”; de un concejal a quien “lo asaltaron tres personas armadas”, y de un automovilista muerto “por un conductor ebrio que quedó impune”. ¿Garantizará la nueva Constitución el fin de la impunidad de conductores ebrios (un tema en que Chile ya tiene una de las legislaciones más estrictas del mundo)? De nuevo, misterio. Ninguno de esos casos se acompaña con una explicación sobre qué hará la nueva Constitución al respecto.
El oficialismo (perdón, “Unidad para Chile”) nos presenta el caso de un negocio al que “han entrado con pistola y cuchillo directamente a las cajas”, y cuyo dueño dice que “me gustaría tener seguridad ahora ya, porque ya estamos cansados de vivir asustados”. ¿La solución?: “Salir a iluminar calles”. Linda promesa para una campaña de concejales (¿porque es lo mismo que “consejeros”, o no?).
La ex Concertación (perdón, “Todo por Chile”) nos convoca a que “trabajemos juntos por más seguridad” y nos promete “un país donde vivamos con seguridad y paz”, en que “nadie se sienta preso por la inseguridad”.
El Partido Republicano pide “defender a quienes nos defienden” y proclama que “no podemos seguir viviendo con miedo”. El Partido de la Gente anuncia que “sí hay terrorismo en La Araucanía y lo vamos a derrotar”, que “con los terroristas no se negocia” y que dará “respaldo total a Carabineros”.
Las demás preocupaciones ciudadanas se tratan con similar liviandad. Abundan los lugares comunes, como que “queremos llegar a fin de mes tranquilos”, o que “la educación está al debe”.
También hay promesas grandilocuentes.
El PS nos anuncia que, ahora sí que sí, “esta Constitución por fin abrirá las grandes alamedas”.
La UDI, en una cita de pésimo gusto a Víctor Jara, nos promete “el derecho a vivir en paz”.
Y la ex Concertación, en una equivalencia igualmente desafortunada, nos invita a encontrarnos “en la esquina de Gladys Marín con Jaime Guzmán”. Mientras, Pamela Jiles aparece en la franja del PDG llamándolos “mis compañeros en tu demanda por el sexto retiro” (antes, Jiles había asegurado, en referencia a Franco Parisi, que “no me relaciono de ninguna forma con acusados de abuso sexual”).
RD reescribe la historia, contándonos que “en 1810 nos pusimos de acuerdo en que seríamos un país independiente”. Y campean las promociones dignas del más entusiasta “¡Llame ya!”. “Más mamógrafos y médicos especialistas” (RN). “Cientos de plantas desalinizadoras de agua” (PDG). “Conectividad terrestre y digital” (RN de nuevo).
¿Aló, Sernac?
El mejor resumen de la campaña es el siguiente spot, presentado como una conversación entre una madre y su hija: “Los precios suben y suben. Por eso, ahora cuando votemos, tenemos que votar para que la cosa la atajen un poco. Sí, hija, voy por los de Chile Seguro, si ya me informé”.
¿Me informé de qué? ¿De que la nueva Constitución va a atajar la inflación?
Usted, estimado lector, no se deje embaucar. Estamos votando por listas que tienen principios políticos e ideológicos, no por una lista de supermercado. Por personas que deberán dialogar y llegar a acuerdos, no por “hombres de acción”. Por las reglas del juego para el Chile de los próximos 50 años, no por más mamógrafos o plantas desalinizadoras. El 7 de mayo votaremos por los encargados de redactar una nueva Constitución, no por quien nos venda, cero millas, del año, nuevecito de paquete, algún combo promocional de “¡llame ya!”.
No fue precisamente lo que ofrecían los anteriores convencionales, una lista de supermercado de derechos “sociales” y que tanto apoyaron los progres como para ahora pontificar al respecto?…
Curioso.
Al menos.
Lo comentado respecto a la chacra ideológica que existe hoy.
La centro derecha es centro izquierda en términos prácticos ideológicos. Por eso no es raro que Lagos apoye a un candidato de centro izquierda inscrito por la centro derecha. Como fue el caso de Sichel, de izquierda, diciendo que Pinochet era el hombre más malo de la historia siendo apoyado como candidato único por la UDI y RN…
FUCKING EMBARASSING…
Si se puede combatir la inflación con una constitución. O al menos reducir los factores asociados a los gobiernos. Porque la inflación es resultado de las acciones de gobierno en términos de emitir deuda y volcarla a la economía. Eso es impresión de dinero con intereses para todos los efectos prácticos. Bastaría con que quedara establecida la prohibición de que el gobierno se endeudara más allá de un límite fijo y que no pudiera aumentar impuestos sin un referendo para ello, y que se auto extingan después de pasada la motivación para ese aumento.
Y si es un enfrentamiento político e ideológico. Lo vimos en la anterior y lo veremos de nuevo.
Son dos visiones de sociedad la que se enfrentan. Y es relevante que estén correctamente representadas en la convención o consejo ahora esas visiones. Y con algo de suerte, respetar las visiones de los otros sin tratar de pasar la aplanadora como lo intentaron los payasos anteriores.
Vean la ultima de Moshiatti, la cosa no es tan clara y segura como se espera, existen serios riesgos en esta ilegal nueva convension
ResponderEliminar¿Se podrá alegar nulidad absoluta de acorde al código civil? Porque este nuevo proceso se saltó la formalidad acordada, a ver si algún abogado se atreve ahora mismo a poner un recurso de nulidad absoluta de acorde al código civil, aunque no se si podrá aplicar para una reforma constitucional, cuya causa u objeto fue ilícito por ir contra el orden público, porque de poderse hacer este creo yo que sería uno de los argumentos para detener la Nueva Constitución, incluso para retrotraerla a la actual en el caso de que esté implementada la Nueva Constitución, pero creo que hay que averiguar y no llegar a ese punto.
EliminarDisclaimer:
Ésta no es una asesoría legal, es meramente una opinión personal con fines de entretenimiento.
Muchas gracias.
Ya me enteré y me parece que no se puede por el código civil por competencia, y me parece también que ya pasó el tiempo para alegar ante el TC, ¿por qué los Republicanos no alegaron la inconstitucionalidad del nuevo plebiscito?, porque el inciso final del artículo 142 de la Constitución de la República de Chile dice "si la cuestión planteada al electorado en el plebiscito ratificatorio fuere rechazada, CONTINUARÁ vigente la presente Constitución", no dice continúa, dice continuará, lo dice en futuro.
EliminarEstoy cab-read-is-im0 de la zzen-zura en Bl099er p0r p4rte de G00-gle, la última g0ta que re-basó el bas0 fue un c0-men-tari0 b0-rra-d0 acerca del c0b-re, aca-s0 ¿deb0 rec-urr-ir a de-mas-iad0s euf-em-is-m0s para pas-ar l0s fitr0s si fuere nec-es-ar-io?, si fuere así que la I......A...... se vaya por d0nde mej0r le que-pa, juno a Ch.atPPT o como se lla.me, incl.us0 pen.sé en jakk.ear a G00.gle y a t0.d0 el In.ternet por es.t0, me sien.t0 como un es.klab0 en las re.des s0.cial.es, no tengo livv.ertad de bus.car a.mi.go.s, me.n0s de ex.pres.sarme, y en la vida real tam.poco por las lellyes an.ti.ac.0s0 y an.ti.pir0p0, h.an he.ch0 m.uy difícil para los h0mb.res el es.table.ser una re.la.sión con un.a m.u.j.er, se requiere ir demasiado despacio ahora y por lo mismo jamás he tenido un.a, aunque reconozco que he sid0 l.ater0 con casi t0.das, lamentablemente t0.das es.taban p0l0leand0 o cas.adas, o sino con un hij0 al menos, mi bús.queda activa fue del 2O1O al 2O19.
ResponderEliminarPor último, no voy a jakk.ear nada no solo porque es il.leg.al, sino tam.bién, porque no tengo los c0n0cimient0s ne.cesari0s en pr0.gram.ac.ión.