Por qué deberíamos 'hacer pesas' a medida que envejecemos

@telegraph

La fuerza mola. Por muy sofisticados que seamos, en el momento en que nos pasan un frasco de mermelada y nos piden que desenrosquemos una tapa renuente, damos todo para ser el héroe de la cocina. La fuerza también es vital para nuestra salud y bienestar , extrañamente fascinante y emocionantemente accesible para personas de todas las edades.

La entrenadora de fuerza Sally Moss dice: “Si comienza tarde, digamos, entre los 50 y los 60 años, es posible volverse más fuerte que cuando tenía 30 años. Sea cual sea tu edad, si eres nuevo en el mundo del levantamiento, serás más fuerte”. Moss, propietario de la empresa de levantamiento de pesas Strength Ambassadors, tiene 48 años y levanta unos impresionantes 70 kg en press de banca.

El hashtag de Instagram Old Man Strength tiene 132 000 publicaciones y aquí encontrarás a caballeros mayores levantando pesas doblados bajo sus enormes pesos. El equivalente más cercano para mujeres es #strongnotskinny (9,3 millones de publicaciones). Ambos son una forma de protesta contra los estereotipos “viejo y frágil” y “siempre a dieta”.

Hay una revolución silenciosa en el entrenamiento de fuerza , ya que la importancia de la masa muscular a medida que envejecemos apenas está saliendo a la luz. El músculo ayuda con la sensibilidad a la insulina, el poder cognitivo, la salud cardiovascular y la densidad ósea y puede evitar que se convierta en una persona mayor que se cae y se lesiona.

Hay una 'revolución silenciosa' en el entrenamiento de fuerza debido a una comprensión más amplia de la importancia de la masa muscular a medida que envejecemos CRÉDITO : Getty

Pero el rincón del gimnasio donde la gente “entrena pesado” (la jerga es muy seductora) puede parecer intimidante.

La mayoría de los entrenamientos de fuerza involucran pesas lo suficientemente pesadas como para que solo puedas levantarlas entre una y cinco veces en cada serie. Los atletas de fuerza que compiten se ven muy diferentes a los culturistas o especialistas en atletismo, y esto refleja un objetivo y un enfoque completamente distintos.

Dan Thomas es un hombre fuerte que compite. A los 45 años, estará haciendo peso muerto con 300 kg simplemente para ingresar a su próxima competencia europea. Thomas, entrenador del gimnasio Commando Temple de Londres, es evangélico sobre los beneficios de "levantar objetos pesados", lo que, según él, lo ha ayudado a superar los problemas de salud mental.

“Tuve un período en mi vida en el que la bebida lo consumía todo, pero el entrenamiento de fuerza reemplazó las cosas que me causaban problemas. Cuando estoy levantando pesas, no me preocupo por las facturas o el trabajo, no me preocupo por nada, solo somos yo y las pesas”.

Thomas dice que ve clientes mayores ocupados que ingresan al gimnasio sin poder subir las escaleras sin quedarse sin aliento y una vez que pueden levantar un peso pesado, sienten una verdadera sensación de satisfacción.

Lo que nos impide a la mayoría de nosotros, mayores de cierta edad, hacer frente a cargas pesadas es el miedo. A los 59 años, sentí el nauseabundo "ping" de un músculo hasta ahora poco interesante en la parte inferior de la espalda cuando intentaba mover un sofá o mover un refrigerador. Las cosas que son tan pesadas o más pesadas que nosotros pueden dañarnos cuando las levantamos. El cambio de piano no es un elemento básico de la comedia visual por nada.

El primer paso en la fuerza es encontrar un buen entrenador CRÉDITO : Getty

Thomas dice que el primer paso en la fuerza es encontrar un buen entrenador. Los consejos de video en línea al estilo de Joe Wicks no podrán ver su mala postura o su peligrosa posición de espalda. No compraría un automóvil, vería un video instructivo de YouTube y saldría a la carretera.

Lleno de una mezcla de entusiasmo e incertidumbre, visité la sucursal de Gymbox en Farringdon para recibir capacitación en levantamiento de objetos pesados. Allí le conté al entrenador personal Eoin Ryan sobre mi historial de mal levantamiento, lesiones y renuencia a levantar cualquier cosa que parezca que podría cambiar mi forma de caminar.

Ryan es uno de esos entrenadores que inspira confianza instantánea. Después de una serie de calentamientos, finalmente recurrimos al peso muerto, un ejercicio que nunca suelo intentar a pesar de ser un hombre de gimnasio habitual.

En cierto sentido, es el ejercicio más directo. Literalmente te inclinas hacia adelante, agarras la barra, la levantas del suelo y la vuelves a colocar. Un movimiento que todos realizamos todos los días recuperando juguetes, lápices y rellenos de sándwich perdidos (¿o soy solo yo?).

Sin embargo, imagina que un lápiz de repente pesa tanto como tú, todo el juego cambia. Lo que descubrí una vez que fui desafiado por un gran peso fue que cada detalle de la postura y la respiración marcaron una enorme diferencia.

Ahora soy alguien que oficialmente "levanta cosas pesadas", y la sensación de logro de mover algo trascendental es demasiado adictiva para no volver a visitarla. Tráeme tus tarros de mermelada...

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Agree…

Lo que cuesta que tus viejos hagan esto…y lo entiendan…

Naaa, estoy muy viejo…naaaa, no es para mi…naaaa ya no se saca músculos a esta edad…

Con dos simples ejercicios estás lejos aún en la cadena alimenticia de los gusanos de cementerio.

Push ups y sentadillas.

Hacer pesas tal vez suene algo intimidante de hecho, especialmente para quienes nunca fueron a gimnasios porque no lo necesitaban en épocas anteriores.

Existen millones de formas de ejercitar fuerza y probablemente con el propio peso, o calistenia, sea la más sencilla una que vez que generas la fuerza para poder levantare.

También hay bandas elásticas profesionales con el cual puedes regular la tensión y entrenar de manera muy segura. Puedes hacer push ups verticales de hecho, como planchas, y puedes pararte de una silla en vez de las sentadillas. Siempre hay formas si en realidad quieres entrenar.

Tampoco es necesario ir tres veces a la semana al gimnasio por un par de horas. No es por estética, es para mantener tu musculatura rodeando tus huesos y evitar que una caída se transforme en algo catastrófico como una fractura de cadera que es terrible, o que un paseo algo más exigente por lugares nuevos para conocer sea un tortura.

Lo importante es mover la cuerpa de manera de usar los músculos y hacer que te quemen de hecho, o llegar a la falla muscular, cada cierto tiempo. No sirve solo caminar para ello. Sirve sin duda para mantener el cardio y las articulaciones y todo el resto, pero hay que empujar la cuerpa cerca de sus límites cada cierto tiempo. Para eso está diseñada. Para responder ante amenazas de manera explosiva.