Volviendo a Grecia y Europa

 

Esta semana se define la participación “voluntaria” de los inversionistas privados en el acuerdo conocido como PSI, el cual debe alcanzar cierto mínimo de participación. El que alcance ese mínimo de participación permite aplicar las clausulas colectivas que obligan a la minoría a aceptar el convenio, lo que debería detonar la activación de los CDS. Pero eso es un libre mercado, cosa de la que distamos mucho estar, así es que hay que esperar a ver cuales van a ser las acciones, tanto de la Troika como del ISDA. Existen cada vez mayores rumores de que no se logrará acuerdo, lo que detonaría de inmediato la no aprobación de Alemania del paquete de rescate y por tanto el default de Grecia. Pero como dije antes, eso es con mercados funcionando limpiamente, en el casino arreglado actual todo puede ser.

Las posibles consecuencias de un default no están claras, toda vez que los bancos centrales se han encargado de inundar de liquidez el sistema financiero, probablemente en previsión de este u otro evento similar, por lo que es imposible saber las ramificaciones. Pero tal vez una señal clara es la que puedan dar las facilidades de depósitos, que es donde los bancos estancan sus excedentes de caja. Si estos aumentan de manera significativa es señal de que se están preparando para una contracción del crédito.

Así es que como recomendación de mercado, hay que intentar mantenerse alejado o al menos muy atentos al menos por esta semana, ya que las bolsas y monedas (en particular el Euro) se verán movidos por cada titular de ésta semana, confirmando o negando el acuerdo y no por aspectos fundamentales (casi nada a esta altura del partido responde a nada fundamental, sólo a la próxima inyección de liquidez).