Súper de Pensiones cuestiona seriedad de recomendaciones de Felices y Forrados

 

@EyN

La empresa hizo un llamado que alerta a sus clientes por una supuesta volatilidad.

Una nueva jugada de recomendaciones previsionales mantiene en alerta a la industria de AFP. El martes, la firma Felices y Forrados (FyF), liderada por Gino Lorenzini -y que ha sido objeto de cuestionamientos por las asesorías que ha entregado a sus clientes-, envió una carta a sus cerca de 400 mil suscriptores advirtiendo que "en las próximas semanas podría darse un escenario similar al del 2008, pero con un agregado incluso peor". Según la empresa, "ante un eventual escenario de crisis de deuda internacional que se avecina, el fondo A podría llegar a perder 50% y el E, un 10%".

Por ello, en la misiva -que está generando fuertes cuestionamientos por parte del sector por su alarmismo- Felices y Forrados recomienda cambiarse al fondo E de AFP Modelo.

Consultada por esta situación, la Superintendencia de Pensiones recordó que "la inversión de los recursos destinados a las pensiones debe realizarse con una mirada de largo plazo".

En su respuesta, el regulador cuestionó la seriedad de este tipo de recomendaciones. Sostuvo que lo que concierne a las decisiones de inversión para la jubilación son "muy importantes como para dejarlas sometidas a sugerencias que pueden resultar llamativas, y en apariencia serias, pero que no están reguladas ni son auditadas por ningún organismo público ni privado".

"La superintendencia invita a los afiliados a reflexionar sobre la adopción de decisiones de cambios de fondo que no consideren su situación particular, ya que pueden llevarlos a asumir riesgos que no están adecuadamente sopesados", agregó la autoridad.

Esta no es la primera vez que el regulador advierte que la estrategia de FyF podría tener impactos negativos. En 2013, la entonces superintendenta de Pensiones, Solange Bernstein, aseguró que el traspaso masivo de fondos tiene impacto negativo en los afiliados y que la estrategia de Felices y Forrados genera pérdidas.

En enero de este año, el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, encendió las alarmas sobre la necesidad de que se regule a los asesores previsionales. La autoridad aseguró que dentro de las indicaciones que prepara el Ejecutivo para el proyecto de ley que regula las actividades de los agentes del mercado, se incluirán cambios para que se pueda normar las recomendaciones que hacen asesores financieros y previsionales.

Regulación
Este tipo de asesores previsionales no están regulados actualmente.

No puedes regular a todos los chicken little´s del mundo. Y si hay que regular y sancionarlos, también habría que hacerlos con los que ven todo color kool aid y dejan que la gente absorba pérdidas monumentales por el clásico consejo de compra en las bajadas y no hay que vender porque se hacen efectivas las pérdidas.

Ahora, el tema de las pensiones es sensible, por lo que va a ser un tema espinudo.

Tanto si les crees a los chicken little´s o a los kool aiders, la responsabilidad recae en los hombros de cada uno en el manejo de los dineros. Responsabilizar a otros por pérdidas de capital, salvo que sean estafas relacionadas con apropiación indebida o fraudulenta de fondos, es de niños pequeños.

Tal vez habría que enseñar acerca de la responsabilidad que le cabe a uno en las finanzas personales y en como ahorra y genera rentabilidades con el dinero ganado por el trabajo. Y también el no creer en todo lo que le dicen a uno. Ni en lo medios ni en la prensa ni conocidos, referenciados o famosos.

En lo que a dinero respecta, al menos en mi caso, confío y responsabilizo a solo una persona por ello. Si sigo o no consejos de asesores o consultores es porque coincide con mi visión o intuición, no porque sea forzada.

Y con respecto a la crisis de deuda, viene de seguro. El punto no es anticipar una crisis, porque siempre existen. El punto es establecer con respecto a esa específica crisis cual es el plan de acción que permite preservar el capital. No todas las crisis son iguales. La de 2008 fue financiera privada, por lo que aumentaron en valor los instrumentos de gobierno y el dinero. Una crisis donde se desvalorizan los instrumentos de gobierno y el dinero tiene otras repercusiones.