“Las cartas están echadas y un cambio es altamente improbable”

@elmercurio

“El escenario y las prioridades de los chilenos cambiaron en estos tres años, y la Convención no lo internalizó”. Un diagnóstico tajante y que desprende de la última encuesta publicada por su empresa Black & White.

A 14 días del plebiscito, el sondeo que lidera Paola Assael muestra la ventaja más amplia —58% sobre 42%— del Rechazo sobre el Apruebo, publicada hasta ahora.

En el día antes que comience la “veda” impuesta a las encuestadoras, la economista UC, liberal de centro en su definición, que militó en la Concertación y apoyó a Sebastián Sichel, explica lo que sustenta ese resultado.

“Ese voto que se asume como indeciso es una persona que no quiere declarar su opción. Puede que finalmente no vaya a votar, pero los indecisos hoy son muy pocos”.

—Otros encuestadores aseguran que los chilenos están decidiendo al final y que los indecisos son claves.

—Discrepo, esta elección se asocia a un texto y no a candidatos, gran parte de la campaña ya se hizo en la Convención. Hay un voto muy emocional, que está muy signado por la opinión sobre la Convención. Por eso es muy raro encontrar a alguien que después de todo este año no sepa qué votará. Las cartas están echadas y un cambio es altamente improbable.

—B&W apostó a que Sichel estaría en la segunda vuelta presidencial, no pasó y Kast fue “relevante”, ¿en qué se equivocó?

—Somos muy rigurosos, tenemos un panel y una metodología muy robustos, aunque hay muchas razones por las cuales un estudio se puede desviar. En ese momento, el competidor relevante no era Kast, pero el escenario cambió drásticamente y una variable clave e inesperada fue que Sichel dejó de contar con el apoyo de la derecha.

—¿Qué factores han inclinado la balanza en esta elección?

—En la entrada, el Apruebo reflejó una altísima demanda por cambio, gran confianza en la Convención como proceso democrático, abierto, con todos los sectores. Un halo de pureza que se fue perdiendo por la actuación de los convencionales, por su tono y estilo revanchista. El principal driver de un voto es siempre emocional. Lo segundo fueron los temas aprobados por el pleno. El escenario y las prioridades de los chilenos cambiaron en estos tres años y la Convención no lo internalizó. Antes eran pensiones, derechos sociales y hoy son delincuencia, narcotráfico, inflación e inmigración.

—Se apostó a explicar en la franja, ¿ha influido menos?

—Podría haber influido si cualquier bando hubiera cometido errores garrafales. Normalmente la derecha hace campañas más amenazantes, pero acertó con el concepto del Rechazo es amor, unidad y es transversal a distintas posiciones políticas.

—¿Fue decisivo que la centroizquierda cruzara la vereda del Rechazo?

—Lo primero es cambiar el término “cruzar la vereda”, porque el Rechazo se posicionó como una opción transversal que no depende de veredas, que une en torno al país que todos queremos, a cambios bien hechos. Nuestros estudios muestran que la principal barrera para votar Rechazo es si la derecha estará disponible para hacer los cambios prometidos. Otro acierto del Rechazo fue el compromiso de Chile Vamos, antes de la elección.

—Como exmilitante de la Concertación, ¿es válido usar imágenes del No?

—Hay un ambiente bastante tóxico en redes sociales, pero los linchamientos y funas no ayudan al Apruebo. Demuestran intolerancia y agresividad y eso no convoca.

—¿Cómo puede crecer el Apruebo?

—Creo que la suerte está bastante echada. A la segunda vuelta presidencial se sumaron más de 1.200.000 votos, muy asociados a una efervescencia juvenil que hoy no vemos. Boric representó la esperanza de cambio y no hay ese estado de ánimo en los jóvenes. Aunque voten mayoritariamente Apruebo, hay una desilusión por cómo se llevó a cabo este cambio.

—¿Suma o resta el Gobierno en favor del Apruebo?

—Aunque no implica causalidad, sí hay una correlación casi perfecta entre desaprobación del Gobierno y Rechazo. Pero quizás si el Gobierno no se hubiera comprometido, el Apruebo estaría peor.

—¿Y afectan las acusaciones de intervencionismo?

—Los chilenos son muy sensatos, republicanos y apegados a las instituciones, aunque las miren críticamente. Por eso la gente está tan cansada del desorden. Entonces el intervencionismo o el desapego a las leyes no son bienvenidos.

—¿No han ido cambiado los electores posestallido?

—Existe una altísima demanda por cambio y tiene que venir, pero uno que mejore las condiciones, no que las empeore. La sociedad chilena no está dispuesta a aceptar los mismos abusos, la misma inequidad y carencia de derechos sociales, pero ya no está en ánimo de “cambios cueste lo que cueste”. Cuidarnos será importante, necesitamos una sociedad más justa, pero también una economía que crezca, tranquilidad para trabajar; cambios con estabilidad.

—En el posplebiscito, ¿cómo queda parado el Gobierno de ganar el Rechazo?

—Si se plantea como un estadista y convoca a las distintas fuerzas políticas y a la ciudadanía para redactar un nuevo texto constitucional, el Gobierno de Boric tiene una buena oportunidad. Lo mismo si gana el Apruebo, debe estar consciente de corregir las debilidades que tiene el texto.

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Lo comentado desde hace rato. Las votaciones las definen emociones y las emociones fueron establecidas durante todo el periodo de deliberación de los flaites.

Y ya está jugado. Todo lo que hagan o piensen que hagan en las campañas de cualquiera de los dos lados no tiene básicamente ningún impacto, que es mi feeling desde Mayo como lo he comentado en LIVE´s y el blog.

Cual sea el resultado del próximo domingo, ya estaba definido desde hace rato.

Salvo eventos que hagan que la gente no vaya a votar por miedo, que afectaría probablemente a todos, no se ve por donde nada de lo que pase esta semana vaya a alterar lo que la gente tiene decidido votar.

Los debates twitteros y youtuberos son solo diversión desde ahora en adelante. Además es entretenido como cada bando interpreta las cosas a su antojo. En un mismo intercambio, cada lado ve la humillación del otro.

Es entretenido.

SO UNCIVILIZED…

BUT FUN…

(esto lo escribí antes de la “performance”, igualmente creo que no mueve la aguja, o mínimamente en relación a lo que ya estaba jugado).