@latercera
El también actor y guionista estadounidense vuelve a la realización con la película que revive un pasaje clave en la historia del básquetbol y el marketing: cuando Nike logró fichar a Michael Jordan. Ya en salas locales.
Su carrera ha incluido blockbusters como Armageddon y premios como la Copa Volpi al mejor actor por Hollywoodland, pero donde más ha brillado Ben Affleck es en la dirección de cintas como Air.
El quinto largometraje de su destacada faceta como realizador, casi siempre ligada a sus roles como guionista e intérprete, que comenzó en 2007 con el aplaudido thriller Desapareció una noche.
La cual también ha incluido al drama histórico Argo, galardonado como Mejor Película en los premios Oscar de 2013, y ahora suma otra cinta que revisita un pasaje de la historia real.
Air: la historia detrás del logo | New Century Films
Pero lejos del conflicto político o el suspenso, ya que la nueva realización de Affleck, subtitulada La historia detrás del logo, se centra en cómo un joven Michael Jordan fichó por Nike.
Un pasaje de la historia deportiva y comercial que el actor/director/guionista estadounidense retrata en pantalla con una de las narraciones fílmicas más ágiles y entretenidas en lo que va de 2023.
La corazonada de Vaccaro
Air: la historia detrás del logo | New Century Films La que será mejor recibida por los seguidores del básquetbol y los conocedores de la crónica de las zapatillas, también conocidas en EE.UU. como sneakers, y su impacto en la cultura popular.
Lo que se conoce a través de un cautivador relato, con bastante humor, que se ambienta en 1984, cuando Sonny Vaccaro (Matt Damon) trabajaba ya hace un tiempo para la empresa Nike.
¿Su labor?: captar jóvenes basquetbolistas para asociarlos a la marca, potenciando la alicaída venta de modelos para baloncesto de la empresa, muy por debajo de Converse y Adidas.
Air: la historia detrás del logo | New Century Films
Algo que se veía difícil ante esa competencia, pero que Vaccaro estaba seguro podía mejorar si seguía su corazonada de apostar todo por uno de los novatos de la temporada: Michael Jordan.
Una idea que sonaba disparatada hasta que consiguió el apoyo del ejecutivo Howard White (Chris Tucker) y el jefe de marketing Rob Strasser (Jason Bateman), además de US$ 250.000.
Una divertida y nostálgica película
Air: la historia detrás del logo | New Century Films El dinero a pagar originalmente por tres figuras emergentes y que tal vez el dueño de la compañía, Phil Knight (Ben Affleck), acepte ofrecer solo por el prometedor chico de Carolina del Norte.
El lugar al que, tras saber que Adidas y Converse también están tras él, Vaccaro viaja para hablar con la figura clave en las negociaciones: Deloris (Viola Davis), la madre del deportista.
Una jugada que podría no resultar, a la que luego se sumará el diseño de una zapatilla personalizada a manos de Peter Moore (Matthew Maher), poniendo en riesgo su propio puesto en Nike.
Air: la historia detrás del logo | New Century Films
Lo que se va conociendo a lo largo de casi dos horas de metraje, marcadas por la atrapante negociación liderada por el incansable Vaccaro y la nostalgia en torno a la década de los 80.
Sin olvidar las actuaciones de su elenco, en especial las de Damon y Davis, y el brillo y la diversión que le imprime a su realización Affleck, que tal vez reflejen su buen momento personal.
DIRECCIÓN: Ben Affleck
PROTAGONISTAS: Keri Russell, O’Shea Jackson Jr., Christian Convery, Alden Ehrenreich, Brooklynn Prince, Isiah Whitlock Jr., Margo Martindale, Ray Liotta
GÉNERO: Comedia, Acción, Suspenso, Terror
CALIFICACIÓN: Para todo espectador mayor de 7 años
La vi anoche…
Si te gusta el basket, y Jordan, imperdible y muy entretenida. Para alguien que no le gusta el basket, no lo sé.
Muy recomendable como fan de Jordan, con música ochentera clásica pero con traspaso a los noventas, y el inicio de los celulares, VHS´s y demás para los nostálgicos de la época, aunque no sé si eso compense si no te gusta el basket.
Te engancha de inmediato la película con los riffs de Money for Nothing de Dire Straits, que debe ser el mejor de la historia.
De ahí en adelante, una pasada.
Es la segunda película que más me ha enganchado este año, la primera fue Plane. Perfecta para verla en casa, y con parlantes envolventes si los tienes, un goce con la música de verdad de aquellos tiempos.
Recomendación ñoña para un FDS helado y de lluvia, que por algún motivo aún no llega…
Además, me da la impresión que las películas de súper héroes llegaron a su fin.
Al menos para mi.
Me gustó infinitamente más ésta película muy sencilla y biográfica que Guardianes de la Galaxia con todo el presupuesto que pusieron en ello.
No creo que vuelva a ir al cine por una película de súper héroes de nuevo. Se transformaron en los nuevos spagghetti westerns al parecer.
Especialmente Marvel.
Ahora…
Si por algún motivo Zack Snyder hace una Justice League 2 con Darkside y Brainiac…
A propósito, en vivo la devaluación de la Roja.
ResponderEliminarhttps://www.biobiochile.cl/noticias/deportes/futbol/la-roja/2023/05/12/se-fue-coca-cola-la-roja-pierde-a-su-principal-auspiciador-que-estaba-desde-1962.shtml
Los que tuvimos 20 años en los '80 (en 1985 en mi caso) recordamos esa época como la mejor, pero mis padres me decían que no era comparable con los '60. Podemos hacer el análisis al infinito y nadie tendrá la verdad porque es muy subjetiva.
ResponderEliminarLo que sí podemos ver es que nada estaba tan saturado como ahora, no se trataba aún de explotar y descremar cualquier buen negocio a ultranza para sacarle hasta la última gota. El marketing estaba en desarrollo, pero no teníamos la sensación constante de ser tanto consumidor como producto ("Si es gratis, es que eres el producto" muy buena frase aplicable a las RR.SS. y apps).
En cuánto a las películas, las superproducciones suelen aburrirme, probablemente por un efecto de saturación, igual cuando te quieren poner demasiado azúcar y colores en un postre. Al final, lo mejor es cuando me cuentan una buena historia y me sorprenden.
¿Y cómo evoluciona todo eso? Ciclos, siempre ciclos.
Supongo que casi todos pensamos que la época de adolescencia y juventud, que es donde disfrutas más la libertad y cero responsabilidad, fue la mejor de la historia. Para cada uno de nosotros efectivamente lo fue. El problema para mi con las superproducciones ahora, es que son solo eso, producciones, no cuentan historias entretenidas de personajes cautivantes, aún simples. Cuando llega algo como Avatar o Top Gun, con historias y desarrollo de personajes muy sencillos pero entretenidos, son un completo goce. Que lejos los tiempos de Gladiador, Matrix o Corazón Valiente. Grandes historias y grandes producciones.
EliminarYo tengo 35, mi adolescencia en los 2000s no me produce mucha nostalgia, ya se veia venir la avalancha de peliculas de superheroes con premisas repetidas.
EliminarSiempre me gustaron las peliculas de los 80s, muchas que vi de niño en los 90s cuando recien llegaban a estrenarse en TV y de verdad creo que fue el peak de la cultura pop. Los videojuegos tambien entre los 80-90 eran pura creatividad y experimentacion, cada avance se sentia en graficos y jugabilidad.
Hasta finales de los 90s dejo de existir el mainstream pop cultural, gracias a internet se empezaron a crear nichos cada vez mas separados, no tengo idea quienes fueron los idolos musicales de los 2010s, ni me interesa averiguar.
Por eso la nostalgia 80 pego tan fuerte, pero ahora ya hay un vacio, no queda mucho para atras que mirar y copiar que apele a la nostalgia, y que los progres no hayan destruido.
Solo nos queda revisitar los tiempos mejores.
La primera Iron Man y 007 Casino Royale…muy entretenidas. Están en mi cerro de DVD’s ( y salvan siempre una tarde lluviosa)
EliminarBy blackout ..... Que te párese que la roja se quede sin sponsor luego de que las grandes empresas decidieran dejar de patrocinar a una roja que ya no rinde .... Como habías comentado " la publicidad es lo primero que se corta cuando la economía no anda bien "
ResponderEliminarEso es porque no quiere Coca Cola asociar su marca al fútbol chileno. No por ahorro de costos. Así debe estar de malo. No lo sigo, pero debe ser horrenda la imagen.
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