“Los chilenos no quieren un cambio de régimen macroeconómico, sino más bien una mayor red de seguridad", indica. Apuesta por la bolsa chilena.
El equipo de estrategia de Morgan Stanley actualizó su visión sobre las acciones Latinoamericanas y reiteró su recomendación de sobreponderar los títulos chilenos. Proyectó, en este sentido, un alza para el IPSA hasta los 4.800 puntos (+31,9%) a mediados del 2021.
La firma estadounidense cree que, en el proceso que se inicia en octubre, “la piedra angular del marco pro-empresarial de Chile debe permanecer en su lugar después de una probable reforma constitucional”.
Respecto a la elección presidencial de noviembre de 2021, dice que “las figuras políticas moderadas parecen estar relativamente bien posicionadas en términos de aprobación en las encuestas de opinión pública y reconocimiento público". Por tanto, "si los chilenos apoyan la continuidad de las políticas (mantener un marco pro empresarial), como parecen sugerir las encuestas, la corrección actual del mercado de valores ofrece un punto de entrada interesante para los inversores".
Morgan Stanley explica que, de cara a la reforma constitucional del 2020 al 2022, “creemos que los votantes chilenos aún ven los beneficios del modelo macroeconómico de larga data del país. Por lo tanto, vemos limitados riesgos en contra en el futuro cercano, aunque las encuestas sugieren que es probable que avance el camino hacia una nueva Constitución". Con todo, reconoce que "el proceso debería seguir siendo una fuente de incertidumbre política" y asegura que "vigilaremos cualquier malestar social que pueda dañar la confianza de las empresas y los consumidores".
La intermediaria recuerda que "encuestas recientes sugieren que los chilenos aprobarán el proceso de reforma constitucional (cerca del 75%) y que preferirían que sea redactada por una Convención Constitucional formada por nuevos miembros elegidos directamente (cerca del 60%)”.
No obstante, afirma que “los chilenos no quieren un cambio de régimen macroeconómico, sino más bien una mayor red de seguridad. Encontramos evidencia de apoyo público hacia una garantía de derechos de propiedad y condiciones de libre mercado para las empresas. De hecho, el 85% de los votantes quiere que la Constitución garantice los derechos de propiedad privada y el 72% está de acuerdo con que las empresas estatales sean tratadas como empresas privadas. Además, el 93% de los chilenos quiere que la educación y la salud estén garantizadas para todos”.
ELECCIONES PRESIDENCIALES 2021
La estadounidense explica que las elecciones presidenciales de noviembre de 2021 podrían ser un catalizador importante para la confianza interna, el crecimiento económico y, por lo tanto, para las acciones orientadas al mercado interno. “El deterioro de la confianza de los consumidores y de las empresas nacionales generado por el malestar social y el proceso de reforma constitucional ha sido uno de los principales impulsores del bajo rendimiento de las acciones chilenas frente a sus pares de mercados emergentes desde fines de 2019”, dice.
Sin embargo, “la elección de un candidato que apoye la continuidad de las políticas (marco pro negocios), como sugieren las encuestas actuales, podría proporcionar a los inversores una confianza renovada en la agenda pro-empresarial del país. Además, creemos que la orientación política de los miembros de la Convención Constitucional (que será elegida en abril de 2021) debería proporcionar información adicional sobre la carrera presidencial”.
Las encuestas nacionales "muestran dos puntos de datos interesantes que respaldan nuestros puntos de vista: a) el índice de aprobación del presidente Piñera sigue siendo alto en comparación con administraciones anteriores en puntos comparables de una presidencia, a pesar de la pandemia en curso y una profunda recesión económica”.
En segundo lugar, Morgan Stanley menciona que “las figuras políticas moderadas parecen estar relativamente bien posicionadas" de cara a los comicios presidenciales.
Así, “el repunte en curso de la actividad económica es importante para ayudar a mejorar aún más el índice de aprobación del presidente Piñera y, por lo tanto, disminuir los riesgos políticos en contra. Por ejemplo, el índice de aprobación del gobierno subió 11 puntos porcentuales (p.p.). desde sus mínimos de principios de octubre de 2019 (10%), y la lectura actual del 21% es 'solo' nueve puntos inferior al 30% del nivel del estallido social. En el frente económico, el número de encuestados que creen que la situación económica de su hogar es buena es ahora del 50%, un aumento de 16 puntos porcentuales desde mayo”.
Aclara, con todo, que su “perspectiva positiva para el país no está exenta de riesgos. Una recesión prolongada podría deprimir aún más la confianza de los consumidores y las empresas (que inició un declive de varios años hace unos años). En ese sentido, continuamos monitoreando las señales de una posible escalada sostenida de protestas sociales, ya que esto podría cambiar la opinión popular e influir en la dirección de las políticas en el futuro”.
Así, en su opinión, “el mercado de valores chileno está descontando un resultado no amistoso con el mercado (not market friendly) en la Convención Constitucional y las elecciones presidenciales de 2021. Las acciones chilenas han generado un alfa negativo (diferencia de rentabilidad versus el índice de referencia) material de -17% durante los últimos 5 meses, que está muy por debajo del alfa negativo de -1% para las elecciones de mercados emergentes en que sale electo un candidato no amistoso con el mercado durante el mismo período”.
Esto “puede explicarse por la incertidumbre en torno a la agenda política (es decir, el proceso de reforma constitucional y las elecciones presidenciales) junto con la profunda recesión económica en curso desencadenada por las medidas de distanciamiento social necesarias para mitigar la pandemia de Covid-19. Sin embargo, si los chilenos apoyan la continuidad de las políticas (marco pro negocios), como parecen sugerir las encuestas, la corrección actual del mercado de valores ofrece un punto de entrada interesante para los inversores”.
TESIS DE INVERSIÓN
La intermediaria tiene una recomendación de “sobreponderar en acciones chilenas en nuestro último modelo de cartera de América Latina, porque creemos que el mercado de valores local debería seguir beneficiándose de las tendencias locales y globales”.
Como ejemplo, cita un sólido balance soberano, dado que “el gobierno chileno anunció un paquete coordinado de estímulo fiscal y monetario interno (12% y 18% del PIB, respectivamente, el mayor de la región) para contrarrestar los efectos económicos negativos de la pandemia de Covid-19, y tiene un sólido historial de ejecución (es decir, 90% de ejecución del presupuesto fiscal en los últimos 5 años). Sin embargo, la deuda soberana neta con respecto al PIB debería aumentar”.
Además, es “probable que el repunte en curso de la actividad económica nacional ayude a mejorar aún más el índice de aprobación del presidente Piñera y el apoyo a los candidatos presidenciales moderados en las elecciones de noviembre de 2021”.
Además, la firma apuesta por un alza en la inflación mundial, contexto en que “nos gusta tener exposición al crecimiento global debido a que los 28 billones de dólares en estímulo monetario de los países del G4 más China deberían respaldar una reflación comercial. El cobre representa aproximadamente el 50% de las exportaciones del país y el 11% de su producto interno bruto”, dicen en este contexto.
Dice que “las acciones chilenas se valoran de forma atractiva según los múltiplos de consenso de 2021", cotizando actualmente a 12,8 veces en términos del ratio precio utilidad al 2021, "por debajo de su promedio histórico de 14,6 veces de los últimos 10 años”.
Así el “precio objetivo actual para mediados de 2021 para el índice IPSA chileno es de 4.800 puntos. A nivel bursátil, nuestros nombres favoritos en el país son Soquimich en el grupo de materias primas y Santander Chile en el grupo cíclico doméstico”, concluyó.
Told ya…
Los capitales no están nerviosos con la nueva constitución porque no ven un riesgo relevante al ambiente general de negocios, menos ahora que los estallidos revolucionarios pendejos son en todo el mundo y los nuestros están pareciendo juego de niños en comparación.
Chile es en esencia conservador. Lo era cuando había ricos y pobres marcadamente, lo es ahora con una clase media enorme que tiene mucho que perder con radicalismos. Los únicos que creen que es radical son los progres de los medios que creen que la opinión del país está en las redes sociales.
La mayor parte del país quiere trabajar tranquila. Concedido que hay un porcentaje alto de pendejos adoctrinados, pero no pesan nada en la economía o en el gran marco de cosas. Por eso Piñera que representa, muy mal por cierto, a ese sector más conservador, salió con 55% sobre un progresista espantoso que prometió puras huevadas.
La gente es crédula solo hasta cierto punto. Y ese cierto punto es cuando ve riesgo cierto de que su estilo de vida pueda caer y el riesgo de eso no es aceptable en relación a las promesas huevonas.
La salud es gratis. La educación igual hasta la media. Y si los inmigrantes vienen en tumulto al país y no a otros vecinos, es porque es mejor que en todo el resto de Latam. Para los ahuevonados progres que quieren compararse a los países nórdicos, primero habría que recordarles que la calidad de cultura y costumbres de la gente debe ser la misma. Igual a la de los políticos. Jackson se habría ido de una patada en la raja con el tema de las donaciones. Además, en esos países no hay 500.000 giles que engañan a la estado para recibir subvenciones. Desde ahí hay que construir.
Al menos eso es lo que parece piensan los capitales dado los movimientos de divisas y tasas. Imprimir artículo
Me imagino los casos de Orpis y Longueira juzgados en países nórdicos.. el caso Caval,, las colusiones.. fraude de carabineros.. fraudes militares.. No es que nos falte plata nos sobran ladrones y ninguna constitución los hará cambiar!!!
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