En el Juzgado de Garantía de San Fernando será formalizado por abuso sexual reiterado de menores de edad Eduardo Macaya Zentilli (71), quien es el padre del senador y también presidente de la UDI, Javier Macaya.
El caso surgió la semana pasada, cuando la familia de una niña de 12 años denunció a Macaya Zentilli por actos reiterados de connotación sexual. A partir de eso, la Fiscalía de Alta Complejidad de O’Higgins comenzó a reunir antecedentes, en base a evidencia y declaraciones de otras denunciantes.
Beatriz Hevia: la abogada osornina que asumió como presidenta del Consejo Constitucional
El Ministerio Público le imputará la comisión de este delito en calidad de reiterado, pues -de acuerdo a las primeras pesquisas- habría, al menos, tres víctimas. Ya con esa información, entre jueves y viernes, el ente persecutor solicitó allanar la casa del imputado y pedir su detención.
La PDI llegó ayer en la noche hasta el fundo Santa Elena, sin embargo, no pudieron encontrar al denunciado. Luego de estas pesquisas, en horas de esta mañana, Macaya finalmente se entregó en el tribunal, cursándose así la orden de aprehensión que había en su contra.
Su abogado, Luis Masferrer, dijo a La Tercera PM que “mi representado es inocente. Toda persona tiene derecho a defenderse de una acusación como esta. Nosotros probaremos la inocencia de mi representado durante el transcurso de esta investigación. Hay varias inconsistencias en la carpeta investigativa”.
“Confiamos plenamente en él”
Este miércoles en horas de la tarde, el senador Macaya se refirió a las acusaciones en contra de su padre. A través de un comunicado, el presidente de la UDI sostuvo que como hijo y “a nombre de toda nuestra familia, mi madre, sus cinco hijos y 15 nietos, queremos expresar que lo apoyamos y confiamos plenamente en él”.
Junto con eso, la autoridad sostuvo tener la convicción junto a su familia que se trata de una acusación falsa. Pese a eso, agregó que como “cualquier chileno deberá acreditar su inocencia en las instancias correspondientes. Por lo anterior, se presentó hoy voluntariamente al Tribunal de Garantía de San Fernando ofreciendo toda su colaboración en esta investigación”.
“Como familia pedimos respeto a la presunción de inocencia y confiamos en que el rol público de uno de sus hijos no sea una excusa para agregar una carga adicional a nuestro padre, que traspase las barreras de la dignidad y el derecho a la privacidad de todos los involucrados, incluidas las personas denunciantes”, concluyó el escrito del senador.
_____________________________________________________
Portada de todos los diarios...
Que complejas éstas denuncias. Y que complejos estos temas sin ninguna duda. Pero, hay que conversarlos.
Primariamente porque el espíritu de, inocente hasta que se demuestre contra toda duda razonable de lo opuesto, en estos casos no existe. Tiene que probar la inocencia el acusado, no la culpabilidad el acusador.
O al menos parece ser la lógica post #metoo. Creérle a las víctimas. Que en esencia es considerar como verdad absoluta sus declaraciones y especialmente puntos de vista.
Mi problema hoy es que cualquier interpretación sobre actitudes o palabras anteriormente consideradas normales, ahora pueden ser presentadas como acoso o la amenaza de él y no hay en realidad como defenderse. Es palabra contra palabra, o peor aún, interpretación de intenciones contra interpretación básicamente.
Recuerdo hace un par de años una reunión con unos amigos muy queridos y que no veía hace mucho tiempo, y a la cual llevaron a sus hijos. Muy emocionante dado que los conocía a ellos desde niños, y verlos con sus hijos, que eran una fusión perfecta de ellos básicamente, fue muy emotivo. El es alemán y ella una chilena morena. La combinación que sacaron es perfecta. Morenos de ojos azules y pelo castaño. Casi de comic. Y obviamente les comenté que sus hijos eran guapísimos, como cumplido estándar, pero también como una realidad obvia. Era la constatación de un hecho.
Después, conversando con otros amigos en la tertulia nocturna del carrete, cuando ya se fueron, me dijeron que había sido súper desubicado con el comentario...
WHAT...THE...FUCK...?... porqué?... respuesta: porque puede interpretarse como pedofilia... yo: pero que cresta tienes en la cabeza para pensar algo como eso?... r: es como hoy se ven las cosas...
yo: no puedes decir ahora que un niño bonito es bonito sin que sea interpretado de la peor forma posible?...
r: Nop...
yo: O sea, si eres hombre, se asume con estos comentarios que eres pedo?...
Yep...
OK, I AM DONE WITH THIS SHIT...
Concedido que los que me dijeron eso se mueven en un ambiente ultra progre de artistas y marketing y tal vez estaban influenciado por ello...
But...ante la duda...
Desde ese momento, dejé de dar cumplidos de ningún tipo que no sean lo más inocuos posibles, a nadie en el rango de potenciales sensibilidades de piel. Es lo más sano. Tampoco acepto el cuidar o quedarme con niños, de nadie, ni siquiera de mis amigos más queridos, estando solo, en ninguna situación. Solo estando con mi pareja hago eso. Que en parte es lo que comenzó a suceder en el ámbito corporativo al principio de esto. No tenías reuniones a solas con una colega. NUNCA. NINGUNA. Siempre con alguien adicional como testigo de las conversaciones. Lo que refleja una falta de confianza abismal en el sistema, y en tus colegas, y por ende la imposibilidad de construir equipos de alto desempeño y como consecuencia, de resultados de excelencia. Con esa clase de confianza, solo puedes obtener resultados mediocres.
No descarto, obviamente, que exista abuso de niños, especialmente de los más vulnerables, existe, sin duda, y es horrendo y asqueroso, pero los que hacen esas aberraciones son la ultra excepción, no la norma.
Es una sociedad enferma la de hoy. No porque existan muchos más pedófilos y abusadores, creo, sino porque ahora todos tienen la mentalidad de víctimas, y por ende en cualquier circunstancia piensan que están siendo abusados, física o sicológicamente. Cosas que antes eran absolutamente normales y neutras o inocuas, como un abrazo o un cumplido, ahora son opresión y acoso...
En fin. Rant de FDS.
Imprimir artículo
Te entiendo perfectamente adyaner ami también me acusaron de acoso y eso que estaba a un metro de distancia y no cruce palabra con la supuesta víctima. Fue otra persona que me acuso la otra persona ni cuenta se dio de lo que supuestamente había hecho. A veces son terceras personas que te juegan de acosador.
ResponderEliminarNadie me acusó de acoso, simplemente de un comentario supuestamente desubicado. Si alguien te acusa de acoso, tienes otros problemas.
EliminarYep. Sin desmerecer a las víctimas de acoso, creo que la cultura de victimismo en general le cagó el mate a MUCHA gente. Y esto es un daño que lamentablemente no es reversible.
ResponderEliminarDigo esto con mucha pena. Junto al cáncer de la cultura narco, es una de las razones por la que pienso irme de Chile.
Nowhere to hide...en occidente al menos.
EliminarHay que evitar cualquier acto que pueda interpretarse como algún interés anormal sobre un menor. Entiendo que los abusos han existido siempre y antes era bastante común principalmente en zonas rurales. Pero ahora esta exagerado, no puedes ni siquiera emitir un comentario cándido sobre un pequeño sin que exista el riesgo de que se interprete torcido. Recuerdo que un colega de mi tío, viajaba en una zona rural, recogió a una señora con su hijo y la acerco a la carretera. El tema es que esta señora lo denuncio por abuso, el hombre no lo podía creer, aunque se resolvió el tema a su favor, quedo con un halo de duda frente a algunos.
ResponderEliminarMi tío me contó con pena porque conocía a este caballero de una vida.
Moraleja, antes en mis viajes siempre llevaba a gente que hacia dedo en el campo (niños, mujeres) , porque entendía que necesitaba acercarse principalmente a carreteras o a un lugar de abastecimiento. Ahora no llevo a nadie, salvo a alguien mayor. Una pena porque entiendo lo difícil de desplazarse para algunos, pero prefiero evitar un cagazo de proporciones.
Deberias dejar de frecuentar a los no amigos que se mueven en un ambiente ultra progre.
ResponderEliminaryo en la oficina tenga una vara/palo de 1 metro de largo mas mi brazo con el que fijo la distancia maxima que se me pueden acercar para no ser considerado acoso.
Tampoco saludo con contacto a nadie en la oficina. solo si un ventas trae a un cliente y este estira la mano, se la doy.
Tampoco deberias tener reuniones a solas con hombres, pueden decir que te gustan las patitas de chancho.
nn
Mientras ellos no se vuelvan ultra progres, no tengo problemas. No me importa si me identifican como gay o cualquier letra del alfabeto. I dont give a flying fuck respecto de lo que piensen otros de mi, salvo, tal vez, de mis más cercanos.
EliminarDebe ser un movimiento pendular, pasamos desde una tolerancia enfermiza hacia el abuso, a una exageración absurda de cualquier cosa q se pueda malinterpretar. Supongo q regresaremos a un punto intermedio en el mediano plazo. Al menos así ha sido en mi entorno más cercano
ResponderEliminar@nonimo/Demócrito:
ResponderEliminarAntes esa denuncia se conocía como abusos deshonestos, hoy tiene otro nombre: abuso sexual
Dada la extensión del termino, la reproducción de sistemas legales extranjeros y la batella entre culturas progre de por medio (metoo# mov) hoy hay que andar con mucho cuidado, es cierto
Si bien la carga de prueba es del Ministerio Publico no es menos cierto que el denunciado si bien tiene una presunción de inocencia a su favor al menos meditativamente no lo favorece, sin duda, porque casi siempre aparece como una condena anticipada
En España una persona que fue condenada por abuso sexual contra supuestamente su "esposa" .. (??/extraño).. al final resultó que había mentido en la declaración judicial incriminatoria pero terminó por confesar años después la mentira para que posteriormente se la enjuiciara a ella, que resultó condenada, y gracias a eso se logro revisar su caso ante el Tribunal Superior español quien finalmente lo absolvió de todo delito al ex marido