SANTIAGO.- En el Hospital de Carabineros se encuentran cinco policías que esta tarde resultaron heridas durante una manifestación en Santiago. Así lo confirmaron desde la institución uniformada, detallando que la agresión ocurrió pasadas las 12:00 de este miércoles, mientras el grupo y una patrulla se encontraba de servicio por una marcha convocada. Fue en la intersección de la calle Amunategui con la Alameda, donde las carabineras fueron abordadas con fierros, piedras y otros elementos contundentes por un grupo de aproximadamente 400 personas. "Debido a un llamado a una concentración y posterior desplazamiento que efectuaron integrantes de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), desde Plaza Italia hasta el frontis de la CUT, se dispuso servicios policiales con la finalidad de resguardar esta actividad", explicó el mayor Gonzalo Urbina, comisario de la 3° Comisaría de Santiago. Urbina agregó que la manifestación partió y se desarrolló de manera pacífica, ocurriendo los altercados ya al final de esta: "Cobardemente, un grupo de 400 personas procedieron a atacar un grupo policial, integrado por personal femenino en su mayoría, resultando cinco carabineras lesionadas en diversas partes de sus cuerpos". "Ataques cobardes que sufrieron mediante elementos contundentes como piedras, botellas y fierros", zanjó. Las funcionarias resultaron con heridas, hasta el momento de carácter reservado.
Supongo que a esta altura muchos grupos de wasap han sido abandonados por las profundas diferencias en lo que al tratamiento de esta crisis, así como sus causas y soluciones se refiere.
Siempre he creído que como sociedad tenemos escondidos un componente criminal y antisocial que solo es reprimido por las construcciones sociales a su alrededor, incluidas las fuerzas de orden y seguridad. De hecho, para eso están, para disuadir acciones antisociales, y contenerlas cuando se producen. Es decir, mantener el orden social.
En el estallido, todas las construcciones sociales que contenían esa malevolencia se derrumbaron. La gente alrededor de estos vándalos y antisociales no hacía (ni aún hace) nada para detenerlos o condenarlos decididamente especialmente en los sectores más vulnerables.
La única forma de contener esa malevolencia si todo resto de la sociedad no contiene a los antisociales con su rechazo explícito y decidido es la fuerza. Le guste a quien le guste. Que es algo no muy popular en la sociedad especialmente porque en los medios masivos, que han tomado la opinión pública completamente por la gente más liberal o progresista, les gusta decir que los vándalos y saqueadores tienen motivos superiores y si solo son convencidos con razonamiento van a deponer sus acciones.
Pero no es así. Cuando enfrentas este tipo de gente en la realidad te das cuenta de dos cosas.
Son violentos, no son empáticos, y son sociópatas, que quiere decir que van a tomar ventaja de ti hasta que se lo permitas porque si eres tan débil como para no detenerlos te mereces el daño que te hacen.
No entiendo definitivamente porqué nadie le explica esto a la gente en los medios masivos.
Con eso se darían cuenta de que sus llamados a la paz y a detener la violencia valen champiñón. Así como el llamado a que los Carabineros no “provoquen” a los manifestantes.
La única provocación que se produjo fue el no actuar con fuerza decisiva al principio. Eso envió el mensaje a los antisociales de que no iban a detenerlos. Cuando tienes a alguien violento e irracional al frente, la única forma de detenerlo es con un golpe contundente que le haga entender que sus actos antisociales van a tener consecuencia catastróficas para el, que es lo único que le importa. Porque pueden quemar todo el país y no les va a importar nada.
Ya enviado ese mensaje de debilidad, es imposible detenerlos sin usar diez o cien veces más fuerza que la que habría sido necesaria en un principio. Y eso ahora no es posible sin provocar una revolución a esta altura.
Lo dicho desde siempre. Si no detienes esto con fuerza decisiva al inicio, va a seguir su curso hasta que no haya cosas que destruir o dinero que gastar. Parece que va a ser lo segundo.
Hasta que de nuevo la contención de la sociedad comience a funcionar y valide nuevamente el accionar de carabineros en aquellos sectores más vulnerables. Por que en los sectores más acomodados eso está descartado por supuesto. Apuesto a que no hay ninguna denuncia de perdigones o violencia en las concentraciones de Plaza Ñuñoa o La Dehesa al principio.
La fuerza es necesaria para contener la maldad que no obedece a razones. Y esos saqueos y violencia es pura maldad antisocial.
Siempre existirá gente que la justifica y precisamente de ellos se valen los antisociales para continuar con su salvajismo en esas instancias.
Mi esperanza es que con el bajón económico estratosférico que se va a producir ahora la gente se vuelque hacia estos vándalos y los responsabilice directamente. Con eso, se acaba esta etapa de violencia y comienza la reconstrucción.
Estoy seguro que los vándalos ni se aparecieron de nuevo por la vega o diez de julio, donde los recibieron con palos y fierros la primera vez.
Santo remedio.
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