El alza del precio de las viviendas, el impacto de la crisis sanitaria y económica por covid-19 y la profundización del fenómeno de la migración son algunas de las causas que explican el aumento del déficit habitacional en Chile, que ya bordea los 1,1 millones de unidades.
El informe “Déficit habitacional en Chile: Evolución y análisis de la crisis de vivienda”, que presentó ayer la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), señala que según datos de la encuesta Casen 2022, se necesitan 935.000 nuevas viviendas para resolver una parte medular del déficit habitacional del país. Esa cifra aumentó 13% desde 2017 y está compuesta por 441.000 familias (47%) que viven allegadas por incapacidad financiera —no les alcanza para una vivienda propia—, 333.000 grupos (36%) que ocupan viviendas irrecuperables —infraestructura deficitaria, precaria o provisional— y 161.000 familias (17%) que viven allegadas y hacinadas, con más de 2,5 personas por cada habitación destinada a dormitorio.
El análisis de la CChC añade que si a estos grupos se les suman las familias que están viviendo en campamentos y las personas en situación de calle, serían necesarias 1.089.000 viviendas para abordar el déficit habitacional en su conjunto a nivel nacional.
Clase media y mujeres
La CChC señaló que junto con el aumento del déficit, le preocupa que este problema esté afectando crecientemente a la clase media. Indicó que la labor del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) ha permitido reducir esta carencia habitacional en los grupos vulnerables y los hogares con viviendas irrecuperables; sin embargo, de 2017 a 2022 el número de hogares de clase media allegados por incapacidad financiera aumentó 165%.
Según la clasificación socioeconómica, el 58% del déficit medular de viviendas —sin campamentos y en situación de calle— está asociado a familias vulnerables; el 40%, a sectores medios, y 2%, a grupos de ingresos altos.
Al revisar la “conformación familiar” del déficit, la mayor cantidad (36%) está ligada a “núcleos unipersonales”, con 336.923 unidades, 99% más que en 2017. Le siguen, entre otros, la categoría “biparental”, con 29%, y luego, con 21%, el segmento “sin núcleo”, es decir, individuos que comparten un techo, pero no tienen vínculo familiar. Estos últimos aumentaron 528% en cinco años, por lo que en la CChC llamaron a ponerle atención a ese segmento.
De acuerdo con el informe, al analizar la situación según el “jefe familiar”, se advierte que el 54% de los hogares o núcleos que componen el déficit habitacional está liderado por una mujer; casi dos de cada 10 grupos (16%), por un extranjero, y el 50%, por una persona menor a 40 años.
En la Región Metropolitana se concentra el 42% de la falta de viviendas en el país, siendo las comunas de Puente Alto, Maipú y Santiago las que lideran la carencia habitacional (ver infografía).
Plazo eventual para terminar el déficit
Si el actual déficit habitacional fuera un stock “cerrado”, esto es, que no se sumaran nuevos requerimientos, terminar con la carencia de viviendas tardaría entre 18 a 20 años, comentó el gerente de Estudios y Políticas Públicas de la CChC, Nicolás León, consultado al respecto. Ello, considerando que el perfil de las soluciones para estos grupos se compone de viviendas sociales o con subsidio.
León indicó que si la entrega de ese tipo de viviendas es como en los últimos años, es decir, del orden de 50.000 anualmente, acabar con el déficit tardaría 20 años. En tanto, si el traspaso de unidades es como pretende el Plan de Emergencia Habitacional del Gobierno, del orden de 60.000 unidades cada 12 meses, se terminaría en 18 años.
De todos modos, cada año se registran requerimientos adicionales de vivienda, por lo que el stock es dinámico.
Llamado a los alcaldes
El presidente de la CChC, Juan Armando Vicuña —acompañado de la vicepresidenta del gremio, Jacqueline Gálvez—, destacó que una de las causas de la merma de viviendas en el país es el encarecimiento de estas. “Desde el 2012 empezó un desacople del precio de la vivienda respecto a lo que recibían las personas como ingresos, y eso se produce a raíz de que se empiezan a restringir los planos reguladores de las comunas, bajando las alturas y las densidades. Después vino la implementación del IVA a la venta de las viviendas, que aumentó 12% el valor de estas, y el retiro del crédito especial de empresas constructoras (…). Hemos seguido poniéndole mucha presión a la vivienda”, afirmó.
Vicuña señaló que la vivienda es “un bien básico” y “hacemos un llamado a todas las autoridades para que faciliten la generación de proyectos, que no se tranquen más. En especial a los alcaldes, quienes tienen un rol importantísimo en adelante para reducir este déficit, deben hacerse cargo. Para ello, tienen que adecuar sus planos reguladores para dar solución a ese déficit que tienen en sus comunas, y no restringirlos”.
El timonel del gremio sostuvo que las autoridades deben abordar este “gran problema que tiene Chile y facilitar la inversión pública y privada. Que los permisos salgan de forma más rápida, más fácil, y no se paralicen los proyectos en la mitad de la construcción”. Recordó que las autoridades se comprometieron con una ley para “reducir la tramitología y permisología”, agregando que “estamos esperando con gran ansia eso, porque va a reactivar la economía”.
Propuestas
A la vez, la CChC propuso una serie de iniciativas para atacar el déficit. Una de ellas es reforzar los programas habitacionales, generando incentivos normativos para masificar la oferta de viviendas en arriendo con subsidio.
También planteó ampliar la garantía estatal al pie de los créditos hipotecarios, elevando el porcentaje al 15% —hoy es de 10%— o aumentando el precio máximo de las unidades, que actualmente es de 4.500 UF. A lo anterior se agrega la generación de un mecanismo de reemplazo ante la eliminación del Crédito Especial a las Empresas Constructoras (CEEC), como podría ser un subsidio directo.
Otras propuestas son impulsar una “densificación equilibrada” y generar incentivos tributarios transitorios para la compra de viviendas. “En crisis anteriores, como en la asiática de 1998, se permitió descontar de la base imponible los dividendos de los créditos hipotecarios”, dijo la CChC.
Yep.
Ahora con cifras lo comentado en algún lado. Hay un déficit de viviendas estratosférico.
Como lo arreglas?
Simple…
Haciendo más baratas las casas y los créditos para ellas…duh…
Que los cabezas huecas de los parlamentarios que tenemos saquen rápido leyes para bajar el precio de la viviendas a uno justo, digno e igualitario…
Sigh…
Estoy en etapa de resignación con respecto a todas las políticas públicas.
No sacamos nada con patalear o quejarnos si tenemos a cargo a los buenos para nada que están hoy en el poder. Y no solo en el gobierno, TODOS.
En un país con políticos responsables, tendríamos incentivos tributarios para descentralizar el país, atraer capitales y por ende bajar su costo de manera que la gente pudiera tener la posibilidad de acceder con mejores condiciones a ello. Y no emitir deuda salvo hasta un límite fijo y solo en el rango corto, para no competir por capital con los potenciales compradores de viviendas.
No es el caso…
So…
Seguirá aumentando el déficit, y no solo en viviendas. En toda la infraestructura. Pagar a estos cabezas huecas sobre sueldos con deuda cada vez más cara implica que dejas de hacer mantenimiento e inversión en infraestructura y servicios públicos, porque obviamente ellos se pagan primero.
Nada que hacer.
Imprimir artículo
Ahh pero lo publica El Mercurie, amigue de la Camere Chilene deLe Construccione, para justificar el negocio y sucio y vil dinero a los Ricosshh.
ResponderEliminarA esa parte de los adoctrinados no les importan las cifras, total su dogma no permite lo privado y mientras la politica publica siga dando casas aunque sean basicas o sociales pero con propiedad privada no les interesa, deben ser viviendas cuyo dueño sea siempre el estado y asi los habitantes chantajeados puedan ser tutelados a su antojo
deberian hacer lo mismo que en japon. No hay subsidio habitacional para comprar una casa a precio bajo mercado, se construyen edificios de viviendo publica que se asignan a gente con problemas habitaciones a bajo costo o cero dependiendo de la situacion de la persona.
ResponderEliminarY los departamentos se asignan a otra familia con problemas si se desocupan.
O lo que se hace en Canada, las viviendas sociales se venden a precio de vivienda social, PERO despues cuando la vende el propietario solo se pueden vender a precio de vivienda social de ese momento. Cosa que no pasa aqui en Chilito. Se las venden bajo precio mercado y despues las venden a precio mercado. Negocio redondo.
nn
Hace unos años hubo una diputada (creo ke era) con inversiones en casas sociales que las revendía despues a precio de mercado
Eliminar