El sector construcción en el país está viviendo una acelerada -y preocupante- pérdida de dinamismo y las expectativas son cada vez más oscuras, a tal nivel que desde la industria aseguran estar cruzando por una "precrisis". Según un informe emitido este miércoles por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), se prevé la inversión en el sector caiga un fuerte 4,6% este año -comparado con 2021-, bastante más que la contracción de 3% pronosticada hace solo unos meses. Gremio de la construcción prevé pobre inversión para 2022 y proyecta que ventas de viviendas caerán cerca de 20% 167 El presidente del gremio, Antonio Errázuriz, sostuvo que "al revisar una serie de indicadores vemos que, lamentablemente, el sector de la construcción está perdiendo rápidamente dinamismo y muestra un comportamiento que, al revisar la historia, se podría calificar de precrisis". "Eso significa que uno de los motores de la economía, como es la construcción, está disminuyendo en forma importante su capacidad para impulsar el crecimiento económico y la creación de empleo", subrayó. De acuerdo con las cifras entregadas por la CChC, durante los tres primeros meses de este año la inversión en construcción aumentó casi 5% respecto del mismo periodo del año pasado, pero cayó más de 7% en comparación con el trimestre inmediatamente anterior. Además, la mayoría de los indicadores de actividad de la construcción registraron fuertes caídas. Por ende, el Índice Mensual de Actividad de la Construcción (Imacon) se contrajo en abril casi 10% anual, tendencia que, se estima, se mantendría en los próximos meses. En cuanto a ventas, en el primer trimestre la comercialización de viviendas en Santiago cayó 41% anual: la venta de departamentos se desplomó 40% y la de casas un 46%. "Los datos preliminares de abril y mayo avalan un escenario muy deprimido para la demanda de vivienda, con cifras de ventas similares a las de años de crisis", apuntó el gremio. 41%se desplomaron las ventas de viviendas en Santiago en el primer trimestreTambién se constata una profunda baja en nuevos proyectos habitacionales, señalando que en el primer trimestre ingresaron solo 5.361 unidades, lo que implicó una caída de 13% anual y de 7% versus el cuatro trimestre de 2021. "Este escenario ha impactado negativamente en el empleo que, así como se recuperó después del periodo peak de la pandemia, muestra en lo más reciente una caída del empleo formal y una estabilización del empleo informal", acotó el informe. Causas Entre las principales causas de estas sombrías perspectivas en la construcción, la CChC destacó la fuerte alza de los precios de materiales, situación que está "lejos de moderarse", sino que más bien "se ha agravado". "Esta situación ha impactado, entre otros, a más de 200 proyectos de infraestructura pública que se están ejecutando a lo largo de todo el país. Entre estos, destacan proyectos de edificación pública que, según el Ministerio de Desarrollo Social, beneficiarían a casi 10 millones de personas", apuntó. Además, alertó por las restricciones de financiamiento. "El dividendo para financiar el 80% de una vivienda de 2.000 UF en un plazo de 30 años llegaba en 2021 a cerca de $183.000. Ese dividendo, con una inflación de 15% y a 20 años plazo, podría llegar a más de $403.000", expuso. Por último, el gremio señaló que al aumento del precio de los materiales y las condiciones más restrictivas para acceder a crédito (tanto para las personas como para las empresas), se suma "la burocracia estatal el retraso en los pagos por parte de empresas públicas y un factor que ha cobrado especial relevancia en los últimos meses, como es una creciente incertidumbre político-regulatoria, que está inhibiendo las decisiones de inversión". Propuestas Dado este escenario, Errázuriz resaltó la necesidad de "impulsar con urgencia y con mucha fuerza la colaboración público-privada, para que el proceso de ajuste que estamos viviendo sea lo menor dañino para las familias. En este sentido, un elemento central es impulsar la inversión privada, que representa en el 70% y el 75% de la inversión total de la economía y del empleo". Para ello, el dirigente gremial propuso seis medidas: "Al revisar una serie de indicadores vemos que, lamentablemente, el sector de la construcción está perdiendo rápidamente dinamismo y muestra un comportamiento que, al revisar la historia, se podría calificar de precrisis". Antonio ErrázurizEvaluar la propuesta de reforma tributaria y reformas laborales considerando oportunidad, gradualidad, focalización e incentivos a la inversión; disminuir la burocracia estatal y asegurar que los mandantes públicos cumplan con sus pagos de manera oportuna por proyectos realizados. También planteó la importancia de "autorizar soluciones excepcionales ante una situación excepcional e imprevistas como es el severo aumento del precio de los materiales de construcción”, acelerar las medidas que contribuyan a mejorar la productividad tanto del país en general como del sector de la construcción en particular. Por último, solicitó "evaluar la propuesta de nuevo texto constitucional a la luz de su capacidad de impulsar el emprendimiento, la iniciativa privada, la inversión y el empleo".
HATE TO SAY IT…
But…
Told ya…
Lo que tenía preocupado el año pasado al central era lo que pasaba después del fin del rush de azúcar.
Here … we … are…
Todo desplomándose miserablemente.
No es arreglable, lamentablemente. Los precios actuales de vivienda son insostenibles, el acceso a crédito para ellos igualmente. Y los arriendos se están disparando como consecuencia, pero con la inflación actual igualmente llegará un momento en el que la gente ya no pueda pagar más y no puedas traspasar simplemente el aumento del dividendo al arriendo y la gente emigrará hacia lugares más baratos, donde sea que estén.
Que infierno de escenario tenemos en las manos.
No me gustaría haber estado en los zapatos de Boric y compañía.
Pero tal vez siendo los psychos que son, capaz que sean los mejores para el trabajo ahora.
No están ni ahí. NO pueden hacer nada, y no van a hacer ni intentar nada para mejorar la situación de la gente y no van a perder ni un solo segundo de sueño por ello. Salvo algunas aspirinas efectistas. No se van a desesperar, no van a tirar el buque por la ventana tratando de ayudar ni van a intentar mantener el orden más allá de sus propios espacios privados de residencia…
Magnífico.
En realidad, no hay nada que hacer y tener mierdas no empáticas y psychos a cargo ayuda a que el gobierno mantenga la calma curiosamente haciendo justo lo que hay que hacer ahora.
Nada. Al menos nada a nivel estructural de estado, economía o de gestión.
Ya fue. Se nos pasó el tren de hacer algo hace un año.
Darwin is coming.